La ciudad de Granada se echó a la calle el 7 de mayo para acompañar a su querida Virgen de la Aurora, que fue trasladada por sus hermandad a la Catedral para ser coronada. La Virgen pasó por lugares por donde hacía décadas que no lo hacía. Todos pudieron disfrutar de uno de los mejores momentos comentos cofrades que se recuerdan. En la Plaza del Carmen, el alcalde le impuso a la imagen la Medalla de Oro de la Ciudad.