Miembros del grupo Stop Desahucios de la Plataforma 15M se han concentrado hoy en la puerta de una casa cueva de Granada para impedir el desalojo de una familia de su vivienda por el impago de la hipoteca, previsto por orden judicial para las once de esta mañana, y que finalmente no se ha producido. La vivienda embargada es una casa cueva con más de un siglo de antigüedad ubicada en el Camino Nuevo del Cementerio, en la capital, en la que viven cinco miembros de una familia granadina. El embargo fue notificado al propietario de la vivienda, Humberto Díaz, hace seis días, por el impago de la hipoteca concedida en el año 2003 por CajaGranada, que tasó su valor en 121.000 euros.
La presencia de cerca de medio centenar de miembros del movimiento 15-M, vecinos y simpatizantes, ha impedido que, al menos de momento, el desahucio judicial se lleve a cabo. Humberto Díaz, de 46 años, reside en la casa cueva con su mujer, de 47 años, dos de sus hijos y un nieto. La entidad bancaria ha subastado la vivienda por un valor de 36.000 euros, el mismo importe que la familia Díaz continúa debiendo por el préstamo concedido para escriturar y arreglar la casa y comprar un coche.
Díaz ha declarado que ha intentado negociar con la entidad la dación en pago o un alquiler con opción a compra a un precio asequible para sus ingresos, una petición cursada por escrito en enero y de la que asegura no haber tenido ninguna contestación. La familia embargada cuenta con unos ingresos que no alcanzan el salario mínimo interprofesional, por lo que no han podido afrontar los pagos de la hipoteca, y carece de otro sitio en el que vivir.
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El portavoz de Stop Desahucios en el barrio, Justo Sansano, ha criticado que el desahucio se ha comunicado con seis días de antelación, y no con el mes que marca la legislación, lo que ha originado un nuevo “drama familiar”.
La entidad bancaria tasó inicialmente el valor de la casa cueva en 121.000 euros, una cantidad que rebajó a 72.000 euros y que ahora ha cifrado en 36.000 euros.
Los miembros del 15-M concentrados en las inmediaciones de la vivienda embargada han permanecido haciendo guardia para impedir o retrasar el desahucio hasta el mediodía y han anunciado que repetirán sus concentraciones en los siete desahucios pendientes en la capital y el área metropolitana para las próximas semanas.