Esta noche el Teatro Alhambra acoge, dentro del ciclo “Flamenco viene del Sur”, el espectáculo “Convivencias”, una historia que se cuenta a través de 4 artistas; la guitarra del maestro Manolo Franco y las voces de tres jóvenes cantaores: Laura Vital, Niño de Elche y Rocío Márquez.
Dualidad constante; latente la tradición en la base pero con una clara evolución en giros melódicos y encadenamientos rítmicos, consiguiendo dinamismo en las formas y en el contenido. Se permiten pasear por un gran abanico de estilos, haciéndolo sin efectismos, sólo ellos, utilizando formas originales de presentar los cantes en el escenario, cuidando la estética y las dinámicas de la escena nuevamente desde la dualidad, desde la tradición y los nuevos lenguajes. El resultado final se resume simplemente en una palabra: frescura.
Manuel Franco Barón nació en Sevilla en 1960. La academia de Matilde Coral fue su lanzadera como tocaor de acompañamiento, tras formarse con Manolo Barón y Antonio Osuna. Antonio Mairena, Naranjito de Triana, Calixto Sánchez, José de la Tomasa, José Mercé, Carmen Linares o Manuel Mairena son sólo algunos de los cantaores junto a los que ha trabajado.
Laura Vital (Sanlúcar de Barrameda, 1980) es aficionada y estudiosa del cante desde niña, fue becaria de la Fundación Cristina Heeren de Arte Flamenco entre 1998 y 2000, año en que ganó el Premio de Jóvenes Intérpretes de la XI Bienal de Sevilla. Desde entonces comenzó una brillante carrera artística y docente, pues ha actuado en los principales festivales flamencos del mundo y sus cantes aparecen en diversos trabajos discográficos.
Rocío Márquez nació en Huelva el 29 de septiembre de 1985. Desde pequeña ya cantaba, pero es a la edad de 9 años cuando comienza a recibir clases en la Peña Flamenca de Huelva. A esa misma edad se sube a las tablas por primera vez en Palos de la Frontera y es premiada en el concurso de fandangos de Huelva organizado por la Peña flamenca de la Orden. Paralelamente comienza sus estudios en el conservatorio, cursando hasta cuarto de grado Elemental de piano. Entre los galardones logrados destacan el primer premio al cantaor más completo del Festival Jóvenes Flamencos de Calasparra 2007, el premio por cantes mineros en el Concurso Ciudad de Jumilla 2008 y, finalmente, la preciada ‘Lámpara minera’ del Festival del Cante de las Minas de La Unión 2008.
Niño de Elche es un cantaor innovador y comprometido con sus ideales políticos y sociales, actitud que deja patente a través de sus letras originales y los textos que escoge para adaptar a la música flamenca. Desde poetas como Miguel Hernández, León Felipe o Fernando Villalón hasta adaptaciones de Manuel Gerena, Paco Ibáñez, Ana María Drack y Miguel Moyares.