A las 21:30 horas irrumpió en la Gran Vía el paso de la Soledad en el Calvario, titular de la hermandad de El Santo Entierro, con la escolta de varios efectivos de la Policía Local. Esta vez funcionó a la perfección el Plan Parihuela. El tráfico apenas se vio perjudicado en una de las arterias más importantes del centro de la ciudad. Los costaleros y los capataces, ayudados por ruedas en los zancos del paso; fueron diligentes en su objetivo.