Los recortes en el servicio de autobús urbano en Granada han provocado que haya menos coches en la mayoría de las líneas y que el tiempo de espera se haya duplicado en algunos casos. Pero lo más grave está por llegar ya que, según los sindicatos, los recortes que le ha impuesto el Ayuntamiento de Granada a la empresa Rober provocarán en breve un expediente de regulación de empleo que afectará a unos 90 conductores.
Los recortes que ya afectan a los ciudadanos provienen de la decisión de la empresa Rober de suprimir 106 horas de trabajo diarias y que cada jornada laborable se realicen en la capital 95 trayectos menos, según ha explicado en Radio Granada el presidente del comité de empresa Ángel Aliaga.
Aliaga asegura que la mala gestión del transporte público en Granada ha llevado a este empeoramiento del servicio cuando en Granada se paga uno de los billetes más caros de España.