Las empresas que externalizan o contratan externamente la realización de una determinada actividad o proceso, deben hacerlo dentro del marco más amplio de gestión de su cadena de suministro, y no como un proceso aislado. Además, los beneficios de la externalización para la empresa se verán afectados por la estrategia general que ésta lleve a cabo en la gestión de las relaciones con sus proveedores, y por la capacidad que tenga para adquirir la experiencia necesaria para gestionar estas relaciones de manera eficaz.
Así se desprende de un artículo publicado por tres profesores del Departamento de Organización de Empresas de la Universidad de Granada, Oscar Fernando Bustinza, Luis Miguel Molina y Leopoldo Gutiérrez, en la revista con mayor factor de impacto mundial del área de Dirección de la Producción, Journal of Supply Chain Management. Se trata de la primera vez que tres investigadores españoles de una universidad pública logran una difusión tan destacada en esta área..
La externalización de actividades consiste en que un proceso o actividad que tradicionalmente se desarrollaba en el seno de una empresa pasa a ser realizado por otra empresa externa a nuestra organización. Es una práctica que se basa en la reestructuración de actividades con el objetivo de potenciar el desarrollo de la actividad principal de las organizaciones, externalizando aquellas que tienen un carácter secundario.
Ahorro de costes
Dentro de los beneficios teóricos de la externalización de actividades se encuentra, principalmente, el ahorro de costes, la reducción de la inversión en capital fijo, la facilidad de acceso a nuevas tecnologías, y el ya señalado de permitir a las organizaciones centrarse en aquellas actividades que son la fuente principal de sus ventajas competitivas. El artículo publicado por los profesores de la UGR analiza el papel de la gestión del conocimiento por parte de las organizaciones en este proceso de externalización.
Los resultados del estudio indican que la naturaleza del conocimiento que se tenga acerca de la actividad externalizada afecta al éxito de la misma. Del mismo modo, se puede afirmar que el aprendizaje organizacional y el saber hacer desarrollados por la empresa en materia de externalización afectan positivamente a los beneficios derivados de esta práctica empresarial.
Los autores del trabajo creen que este artículo “responde a cuestiones fundamentales para las organizaciones, como es saber dónde deben establecer sus límites de actividad”. Los resultados constituyen la constatación empírica de la necesidad de conocer la naturaleza del conocimiento que se tenga en las organizaciones acerca de las actividades a externalizar.
Adicionalmente, los investigadores han comprobado “que el aprendizaje y el saber hacer organizacional en materia de externalización son factores contingentes determinantes del éxito de los beneficios obtenidos de la contratación externa”.