La hermandad de San Agustín ha trasladado esta tarde a sus imágenes titulares desde su capilla de salida, en el convento del Santo Ángel Custodio, hasta la cercana iglesia del convento de San Antón.
Allí permanecerán unas semanas mientras la corporación del Lunes Santo realiza obras de adecuación en la capilla aneja al convento. Se rebajará el suelo para evitar el escalón y se pintará.
Numerosos hermanos repartido en dos tramos por titular han participado en el cortejo, con una puesta en la calle muy correcta y una gran participación de cofrades y curiosos que se han acercado a la calle San Antón para acompañar a la hermandad.
Los acólitos que acompañaban la imagen del Sagrado Protector de Granada han estrenado roquetes de corte hispánico, que iban a ser estrenados el pasado Lunes Santo, cuando la lluvia impidió la estación de penitencia.
La imagen del Santo Cristo de las Penas (pendiente de restauración) ya estaba en San Antón, junto a San Juan. Ambas fueron trasladadas de forma privada.
El Señor (que nunca había salido a la calle con tonelete blanco hasta hoy) ha sido trasladado en las andas del Cristo de la Expiración, cubiertas con el paño mortuorio de los duques de Gor, en poder de los padres Escolapios. La Virgen de la Consolación ha sido trasladado sobre las andas del Señor de La Borriquilla, con dos faroles de su palio con seis candelabros de cera. Lucía su saya blanca con el manto morado que estrenó en el pasado besamanos.
La hermandad pretende que las imágenes estén de nuevo ‘en su casa’ para el voto de la ciudad al su Sagrado Protector que se celebra cada año el 14 de septiembre, día de la Cruz. Mientras tanto, las imágenes recibirán culto en la primera capilla de la derecha de la iglesia conventual de San Antón. La comunidad de religiosas de este convento está encantada con la ‘visita’.