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Las sierras de Cazorla y Segura protagonistas de un nuevo libro de la Editorial UGR
La Editorial Universidad de Granada (www.editorialugr.com) acaba de publicar “La Sierra del Agua. 80 viejas historias de Cazorla y Segura”. La obra ha sido realizada por Antonio Castillo y David Oya, del Instituto del Agua de nuestra Universidad, y financiada por el Proyecto “Conoce tus Fuentes” y la Fundación Caja Rural de Granada. En él han participado 20 colaboradores, expertos conocedores de estas sierras, amén de numerosos personajes serranos, como antiguos pastores, furtivos, guardas, escritores, poetas, venteras, peones o ingenieros forestales, entre otros.
La Sierra del Agua es un canto al agua y a los últimos habitantes de las sierras de Cazorla y Segura (y de sus vecinas sierras de Castril, La Puebla y Alcaraz). Un libro del ayer, de viejas historias que ocurrieron a serranos junto a las aguas de sus vidas.
Una rica y variada amalgama de relatos e historias, como la de la fuente de la Paulera, donde una víbora pico mortalmente a un serrano; o la de las mozas que eran raptadas por sus novios al ir a coger agua a las fuentes; o la de la mujer devorada por lobos en la fuente del Leganillo; o la de las promesas de amor eterno que se hacían en el Nacimiento de San Blas; o la de los últimos bandoleros y maquis que fueron acechados junto a fuentes; o la del canal navegable que se empezó a construir desde la sierra de Castril hasta el puerto de Cartagena . Y así hasta 80 historias de aguas, hombres y mujeres, que vivieron en una sierra inmensa, incomunicada, atrasada, agreste y salvaje, que ya pasó para siempre.
El verano es un magnífico tiempo para el merecido descanso, el ocio y la lectura. Y éste un libro para saborearlo, a ser posible, bajo la fresca sombra de un árbol de ribera, junto a un pipo de agua fría y el rumor de un arroyo, de un caz o de una fuentecilla de sierra.
La Sierra del Agua es una contribución al proyecto “Conoce tus Fuentes”, promovido por la Consejería de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente de la Junta de Andalucía y la Universidad de Granada. Esta iniciativa fue distinguida en 2010 con el premio “REDlife” y en 2011 con el “III Premio Medioambiente de la Fundación Caja Rural de Granada.
