El PP ha pedido hoy a la Junta que ponga en marcha un plan de excavaciones continuo y permanente en Orce (Granada) y su comarca y ha advertido sobre el estado en que se encuentran numerosos restos arqueológicos de estos yacimientos, almacenados en cajas sin inventariar ni catalogar.
Así lo han denunciado en rueda la parlamentaria andaluza popular Ana Vanessa García y el portavoz del equipo de Gobierno en la Diputación, José Torrente, quienes han lamentado que en los últimos diez años apenas se haya excavado en la zona durante seis meses en total y que no se investigue allí desde el año 2007.
Estas críticas se producen después de que el pasado 7 de agosto el consejero de Cultura, Luciano Alonso, anunciara que la Junta ya ha dado los primeros pasos para el reconocimiento de los yacimientos de la Cuenca de Orce como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco y que a partir de septiembre se podrán retomar sus excavaciones.
A este respecto los populares han puesto en duda que los trabajos puedan iniciarse en esas fechas dada la tramitación administrativa que requerirán y han pedido que el nuevo concurso para su adjudicación pueda hacerse “sin vetos científicos, ni personales”.
El PP es partidario de ampliar la declaración como patrimonio mundial a otros yacimientos del entorno, no sólo a los de Venta Micena, Barranco León y Fuente Nueva, sino también a los de Fonelas, Huéscar o Cúllar-Baza 1.
Además ha denunciado el estado en que permanecen almacenados en cajas, sin inventariar ni catalogar, numerosos restos arqueológicos y el hecho de que algunos de ellos hayan sido trasladados a otras comunidades autónomas, lo que podrá complicar su retorno a Andalucía en el futuro.
“Orce no es Atapuerca porque la Junta no quiere”, ha sentenciado Torrente, al tiempo que ha destacado el “potencial” que a su juicio tienen los yacimientos granadinos y la falta de inversión “permanente” por parte de la administración autonómica andaluza.
Finamente ha hecho hincapié en el esfuerzo inversor que pretende llevar a cabo la Diputación de Granada, cercano a los 1,8 millones de euros, en el futuro Centro de Interpretación de los Primeros Pobladores Europeos.