Más de mil jóvenes desempleados consiguen prácticas en empresas gracias al programa EPES

Facilitar el conocimiento del mercado de trabajo, promover el desarrollo profesional y combatir el desempleo juvenil. Son los tres principios básicos del programa de Experiencias Profesionales para el Empleo (EPES) de la Junta de Andalucía, una iniciativa que permite en la actualidad a 1.071 jóvenes desempleados granadinos realizar prácticas en empresas de la provincia. “El programa abre cada año a un millar de jóvenes las puertas del mercado de trabajo, les permite tener su primera oportunidad, la que necesitan para demostrar su valía profesional y para establecer los primeros contactos empresariales”, ha destacado el delegado territorial de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo, José Antonio Aparicio.

Según el balance ofrecido por el delegado, un total de 1.075 personas desempleadas participan este año en el programa que se desarrolla a través de 15 entidades y organismos públicos y 835 empresas de Granada. Las prácticas, que tienen una duración de entre 2 y 6 meses, tienen como principal objetivo ofrecer una experiencia profesional al beneficiario que le acerque al mundo laboral, proporcionándole el conocimiento de los hábitos y valores propios de los entornos laborales en los que el demandante espera integrarse.

Según ha recordado Aparicio, el programa está dirigido, fundamentalmente, a jóvenes desempleados que dispongan de una titulación universitaria, de formación profesional o certificación de Formación Profesional para el Empleo. Entre los requisitos que exige la iniciativa a los aspirantes destaca, además, que no haya transcurrido más de dos años desde la obtención de dicha titulación o certificación, que los demandantes carezcan de experiencia profesional relacionada con su cualificación y que se encuentren realizando un Itinerario Personalizado de Inserción (IPI).

No obstante, también pueden participar en el programa y realizar prácticas profesionales las personas demandantes del primer empleo en la ocupación objeto de la práctica profesional y que pertenezcan a colectivos en riesgo de exclusión social. Las empresas, por su parte, se comprometen a garantizar que las personas que realizan las prácticas (algunas son becadas) no ocuparán en ningún caso puestos de estructura de la empresa, según ha aclarado el delegado.

Puestos y actividades

En cuanto a las áreas profesionales y los puestos o actividades que realizan los beneficiarios, las 5 ocupaciones más ofertadas por las empresas este año son: empleados administrativos, dependientes en comercios, reponedores de hipermercados, auxiliares de enfermería de geriatría y atención al público. Al mismo tiempo, las cinco ocupaciones más solicitadas por los beneficiarios coinciden en los cuatro primeros casos a los que se añade la de empleados administrativos de contabilidad. También piden y se ofertan la realización de prácticas como pinches de cocina, técnicos en educación infantil, recepcionistas, cuidadores de minusválidos, etc.