Las obras de la planta de reciclaje de Alhendín entran en su fase final

Los trabajos de modernización de la planta de reciclaje y compostaje de Alhendín, donde se gestiona la mayoría de residuos que se generan en los domicilios de la provincia , han entrado en su fase final. Las cuatro nuevas líneas de tratamiento de residuos entrarán en funcionamiento, con pruebas en vacío, a finales de este mes y a continuación se iniciarán las pruebas en carga, es decir, con basura, para ajustar equipos y comprobar los rendimientos estimados.

Así lo ha anunciado este lunes en una visita a Loma de Manzanares el diputado delegado de Medio Ambiente, Francisco Tarifa, quien ha estado acompañado por el alcalde de Alhendín, Francisco Rodríguez.

En este proyecto se han invertido más de 20 millones de euros, provenientes de Fondos Europeos, Junta de Andalucía y Diputación de Granada. Esta inversión va a permitir el tratamiento de unas 40.000 toneladas de residuos al año incrementando su capacidad un 30 por ciento sobre la actual y asegurando un servicio adecuado al sector norte de la provincia con 126 municipios y 675.000 habitantes.

Los trabajos que se están llevando a cabo suponen la automatización y ampliación de las instalaciones existentes, así como la construcción de una nueva planta de tratamiento de lixiviados y una planta de afino para la elaboración de un compost de mayor calidad para su utilización en el campo. La nueva edificación contará con una superficie de unos seis mil metros cuadrados en los que se albergarán las cuatro nuevas líneas del proceso de tratamiento de residuos con una capacidad para tratar 30 toneladas a la hora.

Durante este último año se han centrado las labores de la Diputación Provincial de Granada y el Consorcio de Residuos Resur en la resolución de los graves problemas de ejecución que el equipo de gobierno se encontró el pasado verano en la ejecución de estas obras de automatización.

Al año de iniciarse las obras, solo se había ejecutado el 10 por ciento del proyecto cuando el plazo de ejecución que restaba era de un año. La desviación presupuestaria era también muy alta. El giro en la gestión del proyecto y la exigencia formulada a la empresa adjudicataria ha permitido que las obras estén concluyendo en tiempo y forma sin poner en peligro las subvenciones europeas.

“Mucho de lo que aquí se está haciendo y se ha hecho es maquinaria que tiene que fabricarse e instalarse en la propia planta y corríamos el riesgo de no terminarlo en los plazos fijados por la dejadez de los anteriores responsables” de la Diputación, ha afirmado el diputado de Medio Ambiente, Francisco Tarifa, quien se ha congratulado de la gestión llevada a cabo en la planta de reciclaje de Alhendín en esta nueva etapa. “Después de un año de gestión de este equipo de gobierno se puede ver que la obra está prácticamente terminada”, ha señalado en declaraciones a los medios de comunicación.

“Toda la estructura está prácticamente terminada, y está cerrada lo que va a evitar los malos olores al exterior”, ha añadido Tarifa.

El alcalde de Alhendín, Francisco Rodríguez, ha mostrado también su satisfacción por el avance de estas obras que hacen de “Alhendín un referente en el ámbito del reciclaje gracias a la apuesta firme de la Diputación por el medio ambiente”.

“Con esta nueva planta vamos a mejorar mucho al evitar los olores y otro tipo de molestias de las que antes nos daban traslado los vecinos y que, con estas obras que ha acometido la Diputación, se van evitar con creces”, ha afirmado Rodríguez.

Estas obras suponen uno de los proyectos de más envergadura que ha llevado adelante la Diputación Provincial de Granada en su historia. La nave que alberga la planta cuenta con maquinaria de última tecnología para la recuperación y tratamiento de residuos como plástico, papel o cartón con un coste aproximado exclusivo de entorno a los 10 millones de euros.

El proyecto situará a la planta de residuos de Alhendín a la cabeza del reciclaje en España y Europa a la par que mejorarán las condiciones de trabajo de los operarios y disminuirá las molestias por olores.

“Los gases que se generen se van a tratar en un biofiltro que va a permitir extraer los olores de la planta”, lo que facilitará una mayor calidad en el puesto de trabajo favoreciéndose además que el aire salga limpio a la atmósfera, ha especificado el director gerente de Resur, José Manuel Soto, que ha destacado también la inversión en una zona de subproductos de 2.000 metros cuadrados, la nueva zona de aparcamientos bajo cubierta, y un área de acopio de los restos de poda con una maquinaria que los triturará para incorporarlos posteriormente a los procesos de fabricación del compost.

En definitiva, las nuevas instalaciones van a conllevar una mayor recuperación de subproductos que anteriormente terminaban en el vertedero. El valor económico de estos subproductos y los puestos de trabajo que llevan aparejados ayudarán también a la provincia a superar la actual coyuntura económica así como un gran ahorro.