El que fuera alcalde de Castril, el socialista José Juan López Ródenas, está citado a declarar como imputado este martes, a las 10,15 horas, en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Único de Huéscar por la supuesta falsificación de facturas mientras gobernaba en el municipio, durante el anterior mandato, este miércoles a las 10,15 horas, según el exhorto al que ha tenido acceso Europa Press.
La apertura de diligencias en el Juzgado se produjo tras la denuncia interpuesta por el actual alcalde, Miguel Pérez (Nuevo Castril), que atribuye a su antecesor en el cargo los supuestos delitos de prevaricación, falsedad en documento público y malversación de caudales públicos, según consta en el escrito presentado ante el juzgado.
Según el denunciante, cuando el Ayuntamiento estaba unificando y reuniendo las facturas pendientes de cobro para incluirlas en el plan de pago a proveedores impulsado por el Gobierno, detectó “irregularidades” en algunas de ellas, que “podrían tener una importante repercusión en el cómputo total de la deuda a la que ha de hacer frente el municipio”.
De hecho, según el alcalde, posiblemente existan “falsedades” en las mismas que han podido generar el nacimiento de nuevas obligaciones al Ayuntamiento, e incluso “duplicidad” de facturas por “servicios no realizados”, y que han podido conllevar la “indebida generación de intereses financieros”.
Como ejemplo, el alcalde cita el caso de un proveedor que facturó al Ayuntamiento el 15 de marzo de 2010 un total de 30.856 euros por unos trabajos de limpieza de caminos tras el temporal de lluvias que asoló la zona a finales de 2009 y principios de 2010, sin que las tareas se realizaran y con una cantidad de “horas irreales” –llegó a emitir facturas por 37 horas continuadas de trabajo– e “infladas” con el visto bueno de López Ródenas, que tenía el objetivo, según consta en la denuncia, de aumentar así la subvención que recibiría el Consistorio por el Real Decreto que contemplaba las situaciones de emergencia.
Asimismo, los técnicos municipales han podido comprobar que la subvención abonada al Ayuntamiento no fue destinada al pago de las facturas originadas como consecuencia de los gastos derivados de las grandes lluvias, con lo que el actual alcalde sospecha de que la ayuda “habría sido desviada a otro fin”.
A día de hoy, según indica el alcalde en su denuncia, la nueva corporación municipal está procediendo al detallado estudio de las facturas presentadas al cobro al Ayuntamiento, con el objetivo de concretar la real deuda municipal, “la cual podría haber sido indebida y fraudulentamente aumentada por los anteriores responsables de corporación, encabezados por el denunciado José Juan López Ródenas, quien habría precedido a certificar públicamente faltando gravemente a la verdad, diversos documentos municipales”.
Así, el Ayuntamiento está iniciando una auditoría externa para determinar la posible existencia o no de otras irregularidades económico administrativas con posible trascendencia penal, cuyos resultados prevé aportar al Juzgado, así como cualquier documento público que pudiera determinar en su caso “la responsabilidad criminal de cualquier persona pública o privada, que haya actuado criminalmente en contra de los intereses del municipio”, con el objetivo de resarcirlo “de cuantos perjuicios pudieran haberle causado”.
RESPUESTA DEL EXALCALDE
El exalcalde ya ha negado las supuestas “irregularidades” en su gestión y falsificación de facturas durante su mandato y ha atribuido la denuncia presentada por el actual primer edil en el municipio, Miguel Pérez (Nuevo Castril), a una “cortina de humo”.
En un comunicado remitido a Europa Press, el exregidor consideraba “absurda” la “insinuación” de Pérez, que “ya había amenazado” a su predecesor de que “lo callaría como fuera”, “molesto por las opiniones y críticas que, sobre su gestión, vierte en su blog privado”. “Por tanto, era de esperar que se inventara cualquier excusa o estratagema para atacar y desprestigiar al anterior regidor municipal”, señala.
“Llama poderosamente la atención que Miguel Pérez esté tan preocupado por el destino y la correcta justificación de las subvenciones que recibe el Ayuntamiento, cuando él se ha gastado en otros fines el dinero que el Ministerio de Fomento dio al Consistorio para la rehabilitación del Castrillo. Y no hablamos de 30.000, sino de 300.000 euros gastados presuntamente sin control o justificación. A día de hoy, estas obras de vital importancia para Castril están paradas indefinidamente”, indicó López Ródenas.
Para el exalcalde, es también “llamativo” que el actual alcalde “se muestre tan escrupuloso con los trámites de los expedientes municipales y de las facturas de la anterior corporación y no lo sea tanto con los mismos extremos en su actual gestión, que son, a menudo, de una más que evidente ilegalidad”.
“El Ayuntamiento de Castril está atravesando por una de las peores épocas de su historia, con un gobierno cuatripartito, con unas pésimas relaciones entre sus componentes y con una gestión municipal que en sólo un año ha llevado a la ruina al municipio. La situación es de tal gravedad que este mes ni siquiera los funcionarios y empleados municipales han cobrado sus nóminas. No hay que olvidar que el Consistorio mantiene una dedicación exclusiva remunerada para cada concejal del equipo de gobierno y un sin fin de asesores pagados”, sostiene López Ródenas, que considera que la denuncia presentada no es sino una manera de intentar “silenciarle” a base de lanzar contra é este tipo de acusaciones para desprestigiarle.
“Confío en la Justicia y reivindico mi derecho a ser considerado inocente hasta que se demuestre lo contrario y a no ser condenado antes de ser juzgado”, concluía López Ródenas.