La Guardia Civil ha desarticulado una banda dedicada al robo de joyas en viviendas en las localidades granadinas de Armilla, Churriana y Otura, en el marco de una operación que se ha saldado con seis personas detenidas de entre 17 y 30 años y en la que se han recuperado joyas valoradas en más de 35.000 euros.
Los detenidos son responsables de al menos de cuatro robos en viviendas de la zona sur del área metropolitana y están acusados de cuatro delitos de robo con fuerza en las cosas, de un delito de receptación y de un delito de estafa, según informa en una nota el Instituto Armado.
La investigación comenzó el pasado mes de agosto tras un robo en una vivienda en la que sustrajeron joyas valoradas en más de 59.000 euros, entre las que figuraba una colección de relojes de alta gama valorada en más de 50.000 euros, cuyo ‘modus operandi’ coincidía con la menos otros once robos sufridos en viviendas de la zona sur del área metropolitana de Granada.
Las personas ahora detenidas aprovechando la búsqueda de chatarra, localizaban posibles objetivos y vigilaban que no hubiera persona alguna en la vivienda para cometer el delito.
Una vez escogida la vivienda y tras asegurarse que no había nadie, escalaban los muros o vallas del inmueble, forzaban la puerta o una ventana con una palanqueta o una sierra, y tras acceder al interior de los domicilios y sustraían principalmente joyas.
Por último vendían las joyas en diferentes comercios de compraventa de oro valiéndose de una tercera persona a la que le daban una comisión por cada venta.
Tras la inspección ocular en el domicilio asaltado, los guardias civiles del equipo de Policía Judicial de Armilla (Granada) encontraron pruebas que relacionaban a un vecino de nacionalidad rumana de esta última localidad con el robo. No obstante, la detención de esta persona ha sido difícil ya que tenía doble identidad y ha sido necesaria una identificación dactilar para confirmarla.
Una vez confirmada la identidad del presunto autor, la Guardia Civil registró su domicilio y se encontraron joyas y relojes del robo investigado, así como también otros efectos y joyas presuntamente robadas en otros tres domicilios más.
Después del registro fue detenido el primero de los presuntamente responsables de los cuatro robos con fuerza en las cosas y durante las últimas semanas cuatro compatriotas más.
También ha sido detenido un joven español como presunto responsable de los delitos de receptación de objetos robados y de estafa. Este último fue contratado por los ciudadanos rumanos detenidos para que se encargara de la venta de las joyas robadas, cobrando por cada una de las cuatro ventas que realizó cien euros.
La Guardia Civil considera que la banda desarticulada puede ser responsable de al menos doce robos con fuerza en las cosas de las que han sido víctimas otras tantas viviendas durante los últimos seis meses y continúa buscando pruebas que relacionen a los detenidos con los otros ocho robos restantes.