Los empresarios de la estación de esquí de Sierra Nevada han comenzado la puesta a punto de sus negocios tras la caída de las primeras nevada y han pedido a la empresa pública que explota el recinto, Cetursa, que la temporada empiece “lo antes posible”.
El presidente de la Asociación de Empresarios de la Estación de Esquí, Carlos Pascual Morenilla, ha explicado que la crisis también ha afectado a la actividad empresarial del recinto invernal, favoreciendo el cierre de algunos negocios. Por ello, el sector tiene puestas sus esperanzas en la llegada de la nieve para poder recuperarse.
“Los empresarios queremos que, una vez que nieve, la estación se abra lo antes posible y se cierre lo más tarde posible”, ha indicado Morenilla, que ha reclamado en este sentido a Cetursa que este año haya una apuesta clara por promocionar la temporada de nieve en Primavera.
En este periodo del año, la mayoría de las estaciones de esquí están cerradas o en proceso de hacerlo, mientras que Sierra Nevada tiene la oportunidad de ofrecer al cliente una nieve de gran calidad y la posibilidad de practicar el esquí en manga corta, relata el empresario.
Las nevadas caídas en Sierra Nevada tras el comienzo del otoño han dejado buenas expectativas en la estación de esquí ante las próximas precipitaciones, puesto que han tenido un “efecto positivo” en la montaña y servirán de base para que los siguientes copos se asienten y se mantengan en el tiempo.
Sierra Nevada baraja como fecha posible de apertura el primer fin de semana de diciembre, que es la que se han marcado otras estaciones de esquí, aunque todo dependerá de la meteorología, que se espera que empiece a cambiar a finales de esta semana con una bajada de las temperaturas.
La estación avanza estos días en la finalización de los trabajos relacionados con las novedades para la nueva campaña invernal: la nueva alfombra mecánica para el transporte de principiantes (Maitena), aumento de la capacidad de Dauro, el nuevo acceso al telecabina Borreguiles o el refuerzo de la red de nieve producida en Loma de Dílar.