La Guardia Civil realizó ayer cuatro actuaciones contra el cultivo, elaboración y tráfico de droga en la provincia de Granada, que se saldaron con el decomiso de mil trescientas veinticuatro plantas de cannabis sativa en Pinos Puente, noventa y tres kilos de marihuana en una pequeña localidad de la Alpujarra granadina y noventa y cinco kilos de hachís en Gorafe.
Las dos primeras actuaciones, como hemos dicho, las realizó la Guardia Civil, con quien colaboró la Policía Local, en sendos domicilios de Pinos Puente durante la mañana de ayer.
En el primer registro los agentes intervinieron cuatrocientas veintiuna plantas de cannabis sativa, además de veintinueve focos halógenos, veintinueve transformadores, cuatro aparatos de aire acondicionado y cuatro ventiladores.
En el segundo registro la Guardia Civil se incautó de la mayor plantación de cannabis de cuantas se han intervenido este año en un domicilio en Pinos Puente, al descubrir novecientas una plantas.
Además de las plantas, los guardias civiles encontraron cuatro aparatos de aire acondicionado, cuarenta y dos focos halógenos, cuarenta y cuatro trasformadores eléctricos y treinta y seis extractores, aparatos que se utilizan para hacer crecer las plantas de forma artificial en el interior de las viviendas.
La Guardia Civil ya ha identificado a los propietarios de sendas plantaciones y espera poder detenerlos en los próximos días.
Con estas dos últimas actuaciones contra el cultivo ilegal de cannabis sativa, ya son veintiséis las que ha realizado la Guardia Civil a lo largo de este año 2012 en el municipio de Pinos Puente.
Dos detenidos por tráfico de marihuana en la Alpujarra
En otra actuación contra el tráfico de droga, la Guardia Civil de Trevélez ha detenido a dos hermanos, de cuarenta y ocho y cuarenta y tres años de edad respectivamente, a los que sorprendió con noventa y tres kilos de marihuana que ocultaban en cántaras de leche.
La Guardia Civil sospechaba que en un cortijo de una pequeña localidad alpujarreña los propietarios traficaban con marihuana. En una de las vigilancias que los agentes llevaban a cabo en torno al cortijo para confirmar las sospechas, vieron a uno de los propietarios cargar una cántara de leche y le pidieron que les enseñara el contenido, descubriendo entonces que no transportaba el líquido blanco que uno espera ver dentro, sino cogollos verdes de marihuana.
Los guardias civiles, una vez que tuvieron autorización para poder registrar una caseta aledaña a la vivienda de donde salía un fuerte olor a marihuana, encontraron dentro al otro propietario y otras cántaras, que como la anterior, contenían esta misma sustancia estupefaciente, además de numerosas plantas de cannabis secándose y dos básculas de precisión.
Los dos hermanos fueron detenidos por un delito contra la salud pública y puestos a disposición del Juzgado de Órgiva.
Localizados tres fardos de hachís
La última actuación contra el tráfico ilegal de droga tuvo lugar ayer sobre las 19,30 horas en Gorafe, localidad en la que se descubrieron tres fardos de hachís abandonados por el conductor de un turismo que se dio a la fuga.
Poco antes una patrulla de la Guardia Civil de Tráfico había intentado interceptar en la A-92N un turismo BMW con matrícula italiana, pero su conductor se dio a la fuga sin que en ningún momento fuera posible darle alcance.
Fue una vecina de Gorafe al que alertó al alcalde, y éste a la Guardia Civil, de que habían abandonado en la calle tres bultos con restos de arena de playa.
La Guardia Civil se hizo cargo de los bultos y comprobó que contenían noventa y cinco kilos de resina de hachís.