Ha fallecido a los 83 años de edad el fundador de Ron Montero, Francisco Montero Martín, “el tío Paco” como le llamaban los más allegados.
Una bodega fundada en 1963, en el seno de una familia de gran tradición azucarera y por el cual ha conseguido exportar el nombre de Motril fuera de sus fronteras.
El 1 de abril de 1929 nació en Motril Francisco Montero Martín. Era el menor de seis hijos y desde su infancia estuvo en estrecho contacto con la destilería de Azucarera Montero, empresa familiar y que hoy día sigue elaborando el aguardiente de caña del ron que lleva su nombre.
En 1963, decide perseguir su sueño: elaborar un ron de máxima calidad, al más puro estilo tradicional. El camino no siempre fue fácil, pero gracias a su perseverancia y espíritu visionario y emprendedor, consiguió darle su protagonismo al ron dorado cuando todavía no era conocido por la gran mayoría del mercado español. El resultado de esta visión son Ron Pálido Montero y Ron Montero Gran Reserva.
De la tradición ronera y azucarera en la que creció, Francisco Montero desarrolló su propio método de elaboración, generando muchos rumores sobre su fórmula secreta. Sin embargo, él insistía en que lo fundamental es: una buena materia prima, su método tradicional de elaboración y, muy importante: “no tener prisa por vender”. El “tío Paco” se sentía orgulloso de que Motril fuese conocida por su ron y afirmaba con rotundidad: “qué nadie piense que Ron Montero se va a morir, porque hay ron para rato. Yo me iré, pero Ron Montero seguirá con su misma calidad y mantendrá sus señas de identidad. La bodega se queda en buenas manos porque los que siguen, saben hacerlo; se han formado conmigo.”
En 2007, Joaquín Martín Montero, sobrino del fundador, director de la última azucarera de Europa y de la única destilería de melazas de España, compra la Bodega de Ron Montero.
Su esposa, Mª Elena Targa, se encargó de dirigir la reforma de la bodega y a menudo dirige las visitas guiadas. Desde ese mismo año, su hija, Andrea Martín Targa es directora de la bodega; joven y emprendedora sus objetivos están claros: “mantener el espíritu del fundador y crecer poco a poco sin perder jamás la calidad que nos ha caracterizado durante todos estos años”. El entierro tendrá lugar hoy viernes en Motril, la ciudad que le vio nacer.