Iznalloz expone las más de 150 variedades de hongos que brotan en la provincia

Los aficionados a las setas pueden encontrar en el Museo de Micología de Iznalloz un aliado para profundizar en el conocimiento de este producto, del que solo en la provincia de Granada existen más de 150 variedades; así como de sus aplicaciones en el campo de la ciencia o las leyendas urbanas que se han creando a su alrededor a lo largo de la historia.

Este peculiar museo de hongos, el único de la provincia de Granada, está enclavado en el corazón de Sierra Arana, en una antigua casa forestal que ha sido reformada aunque sin romper con el entorno natural que la rodea, según ha explicado en declaraciones a Europa Press el responsable del recinto, Miguel Ángel Martínez.

El visitante podrá encontrar en este lugar una exposición permanente de las más de 150 variedades de setas y hongos que salpican los bosques de la provincia de Granada, como el níscalo –la especia reina en Sierra Arana–, la seta de cardo, que es una de la más apreciadas en la zona, o la senderuela.

Están expuestas en función del tipo de suelo en el que se pueden encontrar, y los visitantes, en su mayoría asociaciones, escolares y universitarios, pueden conocer sus partes y propiedades más peculiares antes de disfrutar de una jornada de recogida de setas.

Este museo público cuenta con cuatro salas provistas con paneles informativos que aportan datos interesantes a la exposición, como el hecho de que el alimento más caro del mundo sea un hongo, la trufa; o información acerca del aporte de las setas al campo de la medicina, como en el caso de la penicilina.

También existe un punto interactivo donde por ejemplo se pueden conocer viejas leyendas urbanas relacionadas con las setas, como aquella que asegura que si metes una cuchara de plata junto a un hongo y ennegrece, es que es tóxico. Una afirmación que “nada tiene que ver con la realidad” y que el centro se encarga de desmentir con datos científicos.

Aunque las visitas en verano son escasas, con la llegada del otoño y la temporada de recogida de setas, aumenta el número de personas que se desplazan a Sierra Arana y el entorno de Iznalloz interesados en el turismo rural y micológico que ofrece la zona, donde pueden encontrarse áreas recreativas, mesones y casas rurales.