La Guardia Civil ha detenido a un hombre de treinta y cuatro años de edad, vecino de Granada, como presunto autor de dos delitos de robo con violencia e intimidación en dos bares de Armilla y Ogíjares, y de un delito de robo de uso de vehículo a motor.
Tanto en uno de los atracos perpetrados como en la sustracción del vehículo, el detenido utilizó una navaja de grandes dimensiones para amedrentar a sus víctimas.
Los hechos que han motivado la detención de este peligroso delincuente, ocurrieron entre los pasados días veintiocho y treinta y uno de octubre.
El primero fue la sustracción a punta de navaja de un turismo Opel Astra en las inmediaciones de los túneles del Serrallo, en Granada. Curiosamente la víctima fue una conocido del detenido, al que no quiso denunciar por miedo.
Al día siguiente, el ahora detenido entró en un bar de Armilla, pidió una copa y, cuando ya no había ningún cliente en el establecimiento, aprovechó que el camarero estaba de espaldas para saltar dentro de la barra con una botella en la mano, agredirlo y sustraerle unos cien euros que había en la caja registradora. La víctima tuvo que ser atendida posteriormente en el hospital Clínico de Granada.
El último robo tuvo lugar sobre las 0,30 horas del pasado día treinta y uno de octubre. No obstante, el ahora detenido había acudido al bar horas antes. Durante toda la tarde estuvo consumiendo diferentes bebidas hasta que el bar se quedó vacío; en ese momento sacó una navaja de grandes dimensiones y le dijo al camarero que le entregase la recaudación. Aunque este último no se movió, el detenido saltó la barra, como ocurriera en el robo anterior, y se apoderó no sólo del dinero de la caja registradora, sino también varios billetes dedicados que tenían en la pared del establecimiento, huyendo inmediatamente después, no sin antes volverse y amenazar a los dos trabajadores del bar que “Como me sigáis os pego dos tiros”.
Los guardias civiles del Área de investigación del Puesto de Armilla, que han sido los encargados de investigar los dos atracos, averiguaron que por sus características físicas, un hombre de entre treinta y treinta y cinco años de edad, pelo corto, moreno y vestido con ropa deportiva de color azul, el atracador podía ser la misma persona.
Después de una serie de pesquisas, los agentes averiguaron que el presunto autor de los robos podía haber sido un conocido delincuente granadino, lo que después corroboraron las víctimas al ver las fotografías que les mostró la Guardia Civil.
El presunto atracador fue localizado y detenido en la carretera de la Sierra, a la altura de la urbanización Lancha del Genil, en Granada; a la vez que el vehículo robado fue recuperado y posteriormente devuelto a su propietario.