La concejala del PSOE, María Escudero, ha asegurado que el mejor abrazo que el alcalde de Granada, José Torres Hurtado, puede dar al Albaicín “es asumir sus competencias y poner en marcha un plan que lo saque del abandono que sufre por parte del Ayuntamiento”. La edil insistió en que el Albaicín no está “para ir sólo en fechas señaladas y luego tumbar en el pleno mociones que abogan por la conservación del patrimonio”.
Escudero hizo esta crítica coincidiendo con la conmemoración el Día Internacional del Patrimonio Mundial y puso sobre la mesa otra vez la “alarmante situación” de abandono por la que pasa el barrio. Por todo ello, añadió, “nos parece muy bien que el PP que gobierna la ciudad proponga un abrazo simbólico al Albaicín, pero estaría mejor, que se preocupara realmente por un barrio de la ciudad que es el corazón mismo de Granada y que, junto con la Alhambra. nos proyecta en el mundo”.
Para la edil, “la realidad es que el Ayuntamiento de Granada tiene en una situación extrema al barrio. Al descontento de los vecinos, se une la desidia de un alcalde que no le duele que los solares estén abandonados, las calles llenas de basuras, que su habitantes estén dejando sus casas por los graves problemas de accesibilidad que tienen y que, la falta de conservación del patrimonio. ponga en peligro la declaración de Patrimonio Mundial de la UNESCO”.
Escudero fue más allá y apuntó que “el PP demuestra todos los días su incapacidad para gestionar el patrimonio cultural de la ciudad y en concreto el Albaicín porque no tienen ni sensibilidad, ni criterio, ni voluntad política”. Así, recordó que el grupo municipal socialista ha llevado a pleno la necesidad de impulsar el Plan Albaicín, y recalcó que “la iniciativa, que se aprobó hace meses, con la unanimidad de todos los grupos municipales no se ha traducido en diligencia por parte del equipo de gobierno incapaz en nueve años de sacarlo adelante”.
La concejala del PSOE insistió en la necesidad de que se desarrolle el Plan en colaboración con la Junta de Andalucía, ya que “se trata de un instrumento imprescindible para compatibilizar la conservación con la habitabilidad y la calidad de vida de los residentes”. Para Escudero, “un barrio vivo, habitado, es la mejor garantía para su conservación”, por lo que recalcó que “el Albaicín no puede estar gestionado solamente hacia la explotación turística porque sin su gente el barrio muere”.
Como ejemplo de la irresponsabilidad de Torres Hurtado en la conservación del patrimonio, la edil recordó que también, recientemente, “elevamos una moción al pleno proponiendo que se redactara un plan de actuaciones urgentes en colaboración con la Junta de Andalucía que el PP rechazó”. En este sentido, apuntó que “el Ayuntamiento tiene la obligación de coordinarse con la Junta y con el Gobierno de España para llevar a cabo una política del patrimonio hasta ahora inexistente. El turismo cultural puede y debe ser nuestra primera industria, sin embargo, lo que ahora tenemos es una absoluta ausencia de criterio y una desidia municipal que está matando la gallina de los huevos de oro llevando a Granada a retroceder en sus posiciones en relación con otras ciudades patrimoniales”.