La Audiencia de Granada ha absuelto al alcalde de Gójar (Granada) y diputado provincial del PP, Francisco Javier Maldonado (PP), de los delitos de prevaricación urbanística y falsificación de documentos por los que ha sido juzgado, al considerar que todo pudo deberse a un error.
La sentencia, a la que ha tenido acceso Efe, absuelve así a Maldonado y a otros siete acusados, entre los que figuraba el exalcalde socialista del municipio Pedro Clavero.
El alcalde de Gójar y el resto de acusados fueron enjuiciados por la concesión de licencias para la construcción de tres casetas de aperos que no tenían la superficie mínima exigida por el PGOU local para poder construir.
La Audiencia recalca que “no cabe excluir la posibilidad de error” de Maldonado y el técnico municipal, que habrían entendido que la Comisión Provincial de Urbanismo había modificado un artículo que permitiría la concesión de unas licencias, un hecho que no sucedió.
Durante el juicio, tanto el alcalde como varios testigos mantuvieron que todo respondía a un error de transcripción de la comisión informativa de Urbanismo, tras la que se escribió un “favorable” cuando correspondía un “desfavorable”.
“Ese error, que afectaría a los elementos esenciales del delito de falsedad que se les atribuye, habría determinado la expedición de licencias. El error sería difícilmente vencible, y por eso eximiría a los acusados de responsabilidad penal”, explica la sentencia.
La Fiscalía solicitó para el alcalde de Gójar diez años de prisión por los tres delitos y otros catorce de inhabilitación para cargo público.
El fiscal pidió penas de entre uno y cuatro años y medio de cárcel para el resto de los acusados, entre los que estaba la secretaria municipal, un secretario habilitado por el Ayuntamiento en 2003, cuando sucedieron los hechos, el arquitecto municipal, la concejal de Urbanismo, el primer teniente de alcalde y dos ediles de la corporación que asistieron a la comisión informativa en la que se aprobó por unanimidad conceder las licencias.
Durante el juicio, el alcalde de Gójar recalcó que la concesión de las tres licencias se debió a una cadena de errores sin ningún tipo de intención ni trato de favores.