Los seis trabajadores despedidos por Fomento de Construcciones y Contratas, concesionaria de la gestión de la planta de residuos y reciclaje de Alhendín, han cumplido su segundo día en huelga de hambre en protesta por esta decisión de la empresa y no descartan endurecer sus protestas si no se atiende su reivindicación de ser readmitidos.
Los afectados son seis hombres de entre 40 y 50 años, todos padres de familia cuyos ingresos suponen el único sustento económico que entra en sus hogares, y que tenían una media de diez años de antigüedad en la empresa antes de ser despedidos.
Antonio Rodríguez Soto, de 40 años, ha explicado en declaraciones a Europa Press que los seis han pasado la noche a las puertas de la empresa en la capital, donde han trasladado hamacas y mantas para soportar las bajas temperaturas que azotan la provincia estos días.
Aunque ningún responsable de la empresa se ha puesto en contacto con ellos, están recibiendo “mucho apoyo” de sus compañeros de trabajo y sus familiares, que les hacen visitas “continuas” para ver que “están bien”, ya que la falta de alimentos ha provocado los primeros mareos a varios de ellos.
Los extrabajadores comenzaron la huelga de hambre sobre las 8,00 horas de este miércoles a las puertas de la empresa y su intención es mantener la protesta hasta que se les dé una solución.
Los servicios jurídicos de CCOO han presentado una demanda contra estos despidos y piden la nulidad de los mismos al considerar que se “están vulnerando los derechos fundamentales de estos trabajadores”, todos afiliados a CCOO, que ostenta la presidencia del comité de empresa.
Éste por su parte, se niega a aceptar las condiciones del nuevo convenio colectivo, al incluir medidas como una rebaja salarial del 50 por ciento que a su juicio “no está justificada” salvo para incrementar el “margen de beneficio de la empresa”, y que supone la pérdida de derechos consolidados para el conjunto de la plantilla, integrada por unas 150 personas.