La gerente de la empresa de grúas Taboada, Esperanza Iglesias, se encerró anoche en el Ayuntamiento de Santa Fe para exigir al Consistorio que le abone los 250.000 euros que le adeuda por los servicios que ha prestado en el municipio. Este mediodía, según ha explicado a Efe, ha sido desalojada del edificio por agentes de la Policía Local, aunque mantiene la protesta en la puerta de la casa consistorial.
La empresa de grúas Taboada prestó sus servicios al Ayuntamiento hasta hace cuatro años, momento en el que el Consistorio adjudicó el servicio a otra empresa. Desde entonces, y según los datos aportados por la gerente de la empresa, el Ayuntamiento mantiene una deuda con Taboada de 250.000 euros, después de haber pagado 50.000 euros en las últimas semanas. “De aquí no nos vamos a mover hasta que no salden la deuda, y parece que tendremos que pasar en la calle la Nochebuena mientras el alcalde la celebra en su casa”, ha lamentado Iglesias.
La deuda que el Ayuntamiento mantiene con esta familia ha provocado que no hagan frente a su hipoteca, por lo que su vivienda salió a subasta el mes pasado. “La pude salvar de la subasta el mes pasado, pero puede que este mes la vuelva a perder. Si ellos no pagan, yo tampoco puedo hacerlo”, ha apuntado.
A esta falta de liquidez se ha sumado un embargo de las cuentas corrientes de la familia ejecutado por la Diputación de Granada, por no haber hecho frente a un recibo de basura valorado en mil euros. “El recibo lo mandó el Ayuntamiento de Santa Fe, cuando nosotros no tenemos vivienda alguna en el municipio, ni estamos empadronados aquí”, ha detallado el gerente de la empresa afectada.
Iglesias ha reprochado al alcalde del municipio, Sergio Bueno (PSOE), que en octubre anunciara que haría frente a todos los pagos pendientes y que no lo haya respondido a la deuda. “Por aquí no ha pasado nadie a dar explicaciones, sólo una pareja de policías para echarme del edificio. Me quedaré en la puerta protestando el tiempo que haga falta”, ha subrayado Iglesias.