Treinta y dos voluntarios de Protección Civil de Baza han aprendido a realizar maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP) y a manejar el desfibrilador semiautomático en el curso de “Soporte Vital Básico y manejo del Desfibrilador”, que ha impartido Cruz Roja en las instalaciones del Parque de Bomberos.
Cuando y cómo realizar la reanimación, identificar las arritmias y cómo manipular los desfibriladores para restablecer el ritmo cardíaco son algunos de los aspectos que se abordaron en el curso, tanto en su parte teórica como práctica.El curso ha sido especialmente útil para los voluntarios, ya que el Servicio contra Incendios dispone de dos desfibriladores que se desplazan a todas las intervenciones a las que se acude.
La coordinadora de la agrupación de voluntarios de Protección Civil, Inés Mesas, ha explicado que el curso ha tenido el doble objetivo de saber actuar en los casos en los que sea necesario y obtener la acreditación y autorización de la Consejería de Salud para utilizar los desfibriladores, ya que cualquier persona no sanitaria puede usar un desfibrilador siempre que tenga conocimientos básicos y mínimos. “La desfibrilación temprana puede suponer la diferencia entre la vida y la muerte. La resucitación cardiopulmonar unida a la desfibrilación en los 3 a 5 minutos siguientes al colapso, pueden producir tasas de supervivencia superiores al 49%” ha detallado Inés Mesas, quién ha recordado que el “uso precoz de los DEA dentro del conjunto de la cadena de supervivencia consigue un porcentaje de recuperación de las paradas cardiacas, con buena función neurológica, muy superior a la que se consigue cuando no se utilizan, o su uso se retrasa. Es imprescindible el uso de un desfibrilador para revertir la fibrilación”.