Los alumnos del instituto Cervantes de Granada han suspendido las clases a primera hora, por segundo día, como protesta por la falta de calefacción en el centro, ubicado en el barrio de Bola de Oro.
A lo largo de la mañana, la dirección del instituto ha conseguido el que suministrador de gasoil llene la caldera, aunque sin tener garantías de cobro. Hasta las 13h, los radiadores no han comenzado a calentarse (según testimonios directos de alumnos) y los padres y madres de alumnos han recibido información del centro de que existe, además, un problema en la caldera.
La delegada de Educación Ana Gámez, ha asegurado que esta mañana la calefacción ha funcionado y las clases se han impartido con normalidad.
[mp3j track=”Escucha a Ana Gámez@wp-content/uploads/2013/01/ana-gamez-calefacción-si-funciona.mp3″]
Buena parte de los colegios e institutos de la provincia atraviesan puntualmente por situaciones parecidas toda vez que nila Consejeríade Educación ni los ayuntamientos están transfiriendo a los centros las cantidades económicas a las que se encuentran obligados.La Consejería ha asegurado a Radio Granada, en cualquier caso, que está al corriente de pago con los centros y que en el caso de los centros de secundaria, existe autonomía para ajudicar los gastos y el no haber llenado el depósito de gasoil ha sido una decisión desdafortunada.
[mp3j track=”Escucha a Ana Gámez@wp-content/uploads/2013/01/ana-gamez-centro-poco-afortunado.mp3″]
La Juntade Andalucía tiene la responsabilidad de mantener el material necesario para la docencia y los ayuntamientos están obligados a sufragar los gastos del mantenimiento de los colegios de primaria, incluyendo la luz, el agua y la calefacción.
Fuentes de distintos centros han asegurado quela Consejeríade Educación presiona a los equipos directivos de los centros para que ni se les ocurra difundir públicamente que tienen problemas.
Según las direcciones de varios centros consultados, las administraciones competentes no ha trasferido las cantidades que les corresponden desde comienzo de curso, por lo que los suministros de oficina, gasoil, mantenimiento informático se están cubriendo gracias a la generosidad de quienes prestan el servicio sin saber si algún día podrán cobrar.