Los más de medio centenar de trabajadores de cafeterías y almacenes de cuatro hospitales granadinos afrontan su tercer día de huelga para protestar por el impago de sus nóminas, aunque abrirán desde mañana dos de las cafeterías para cumplir con los servicios mínimos.
La Junta de Andalucía ha aprobado unos servicios mínimos del 30 por ciento para los empleados de las cafeterías de cuatro centros hospitalarios de Granada, lo que se traduce en abrir una cafetería en Traumatología y otra en el Ruiz de Alda.
Juan Pedro Luque, delegado de CCOO en el comité de empresa, ha explicado a Efe que atenderán al público general y a los facultativos en los desayunos y los almuerzos, con ocho trabajadores por centro al día.
Además, uno de los trabajadores de la adjudicataria, la empresa Brassica, trabajará en el turno de noche de estos dos hospitales para servir las cenas, aunque en este caso sólo para el personal sanitario.
Los 56 trabajadores, que ya estuvieron dos días en huelga en noviembre del pasado año, mantienen sus concentraciones de protesta cada mañana en las puertas del edificio de Gobierno del Hospital Materno Infantil.
Reclaman así el pago de sus nóminas, pendientes de cobro desde mediados de septiembre por parte de la empresa Brassica, que mantiene otro conflicto por comedores escolares.
Luque ha detallado que la Junta les ha pedido una semana de margen en las negociaciones, aunque consideran que este plazo se suma a otros muchos que han pasado ya sin que el conflicto se haya resuelto.
Roberto Valle, delegado de UGT en el comité de empresa, ha explicado a Efe que esperan desde hace meses la subrogación del servicio para poder cobrar los salarios que les adeudan o que empresa que se haga cargo del servicio los despida.
“Necesitamos que una de las dos cosas pase ya, porque así trabajamos sin cobrar y sin saber qué pasará con nuestros trabajos en el futuro próximo”, ha apuntado Valle.
El medio centenar de trabajadores espera el cobro de cuatro mensualidades, lo que suma una cuantía aproximada de 5.000 euros de media por asalariado.
Este conflicto laboral se suma al que se registra en comedores escolares gestionados en distintas provincias por la empresa Brassica, cuyos trabajadores en Cádiz también mantienen una huelga en el servicio.