La moción de censura que ha prosperado en Cortes de Baza, interpuesta por el PSOE y un grupo de independientes contra la hasta ahora alcaldesa, Práxedes Torrecillas (PA), se convierte en la duodécima solventada en un ayuntamiento andaluz desde los últimos comicios municipales, en mayo de 2011.
Con la moción de Cortes de Baza, la socialista Ana María Ruiz se ha convertido este lunes en la nueva alcaldesa del municipio arrebatando así el bastón de mando local a Torrecillas, que formaba gobierno con los tres concejales que el PA obtuvo en las pasadas elecciones municipales, una edil del PP, y otros dos del PSOE, entre ellos la propia Ruiz.
Hasta este momento, la de Armilla había sido la última moción de censura que había prosperado en un municipio andaluz, el pasado 21 de enero. En él, el socialista Gerardo Sánchez resultó elegido alcalde tras presentar una moción de censura contra el hasta entonces regidor Antonio Ayllón (PP), que apoyaron IU y el concejal del partido independiente IDEA, José Luis Castillo, al que su grupo expulsó y dejó sin militancia.
El PP denunció entonces en el juzgado la celebración del pleno con la moción de censura pero el juez lo declaró legal al considerar que la moción fue promovida antes de que Castillo fuera reprobado.
Según la información recopilada por Europa Press, ya son doce los ayuntamientos en andaluces en los que han prosperado mociones de censura que han apartado de los gobiernos municipales a los alcaldes que inicialmente fueron elegidos. Tras estos procesos, el PSOE ha sido el partido que se ha hecho con más alcaldías, aunque también ha perdido destacadas ‘plazas’, como la de Benalmádena (Málaga), el municipio más grande de la Costa del Sol en el que gobernaba hasta entonces.
A mediados del año pasado en ese ayuntamiento malagueño, el PP, en colaboración con Unión Centro Benalmádena (UCB), se hizo con la Alcaldía desbancando al socialista Javier Carnero, que gobernaba junto a estos independientes e IU.
El PP volvía a gobernar en Benalmádena a través de una moción de censura, como habían hecho cuatro años antes cuando PSOE, IU y UCB lo hicieron en tripartito aunque en aquel momento fue una edil tránsfuga de UCB la que con su voto dio a Enrique Moya el bastón de mando municipal. Ahora los concejales de UCB han mantenido las concejalías que tenían y PP, con Paloma García como alcaldesa, se hicieron con las de PSOE e IU.
LA PRIMERA, EN DIEZ DÍAS
Cuando apenas habían pasado diez días desde la conformación de los ayuntamientos, en el de El Saucejo (Sevilla) se registró la primera moción de censura de un consistorio andaluz en este mandato. Cuatro concejales de IU-CA y los tres del PP presentaron esa iniciativa contra el alcalde, el socialista Bernabé Oliva, quien había revalidado su cargo con mayoría simple.
Tras su debate, a principios de julio, el candidato de IU-CA, Antonio Barroso, se convirtió en alcalde por los votos de la federación de izquierdas y del PP, relevando así al regidor del PSOE, quien, con cuatro concejales, había gobernado hasta ese momento con mayoría relativa gracias a la abstención de dos ediles del PP en la sesión de investidura del 11 de junio.
Dos semanas después de triunfar esa primera moción, el 18 de julio, los cinco concejales de Ciudadanos Demócratas Independientes (CDeI) y los cuatro del PSOE en el Ayuntamiento de Pozoblanco (Córdoba) presentaron en dicha localidad la segunda de las dos registradas en los primeros cien días de nuevos consistorios, en este caso para desbancar de la Alcaldía a Baldomero Romero (PP).
Ambas formaciones se comprometieron a ocupar la Alcaldía dos años cada una en virtud de la mayoría absoluta que alcanzaban con su pacto, que acababa con el gobierno municipal que se había conformado inicialmente tras las elecciones locales del 22 de mayo, que había quedado en manos de PP y PA, que sumaban siete ediles.
Antes de que terminara 2011, en la localidad onubense de Niebla, la socialista Laura Pichardo alcanzó la Alcaldía por la moción de PSOE y PA registraron contra el hasta entonces alcalde Antonio Fernández (PP). Desde entonces, los socialistas gobiernan en minoría porque el apoyo de los andalucistas a la moción no conllevó un pacto de gobierno.
SEIS MOCIONES EN 2012
Ya en 2012, en enero, el ‘popular’ Francisco González se hizo con el bastón de mando municipal de Mollina (Málaga), en un tenso pleno, gracias al apoyo de los tres concejales de IU, desbancando así a Eugenio Sevillano (PSOE); mientras que al mes siguiente, en el municipio de Laujar de Andarax (Almería) fue el PSOE el que a través de una moción de censura con el apoyo de un edil del PIL –partido nacido de una escisión del socialista– el que arrebató al PP la alcaldía. Con este movimiento, volvió a la Alcaldía el que había sido alcalde en la anterior legislatura, Emilio Romero.
También en Almería, en Enix, el PP se asoció con el socialista Juan Hernández Salmerón, expulsado del partido por ello, para lograr la aprobación de la moción de censura presentada contra el entonces alcalde José Arcos (GIE). Francisco Amate fue elegido de ese modo alcalde, meses después de que las urnas le dieran un empate en el número de concejales con el GIE y de que el socialista hubiera decidido en la primera investidura apoyar al independiente.
El Ayuntamiento de Guadahortuna (Granada) también tuvo moción de censura el pasado año. Josefa Caballero, del PSOE, fue elegida alcaldesa después de que el único concejal del PP, Jesús Sánchez, decidiera retirar el apoyo que inicialmente le había dado al hasta entonces alcalde de IU, Juan Jiménez.
Por último, los socialistas también se hicieron, junto con IU, con la Alcaldía de Cantillana (Sevilla) en octubre del año pasado tras una moción que desbancó a Enrique Naranjo (PP), que había gobernado en solitario. Al mes siguiente, el socialista Pedro Fernández retornó a la Alcaldía de Colmenar (Málaga) después de la moción que el PSOE y Convergencia Andaluza (CA) presentaron contra Antonio Jesús Fernández (PP), que gobernaba en minoría desde noviembre de 2011.