Este viernes 1 de marzo, en la Clínica Inmaculada de Granada, ha sido operada con éxito la paciente más obesa de Andalucía, con 260 kilogramos y de 21 años de edad: Manoli D.R.
El prestigioso cirujano Carlos Ballesta, que cuenta con más de tres mil cirugías de la obesidad y la diabetes a su espalda, ha sido el encargado de llevar a cabo esta operación realizada a través de la técnica laparoscópica, de la que él mismo es pionero, que ha consistido en llevar a cabo “un by-pass de asa larga que es la operación más adecuada para este complejo caso” según afirmó el propio galeno a la finalización de la intervención.
Manoli entró hoy a quirófano tras haber perdido ya 60 kilos gracias al trabajo previo que le había encargado el Doctor Ballesta antes de ponerse en sus manos. En los próximos días, según ha asegurado también el galeno “gracias a la cirugía, se espera que pierda otros 15 kilos y a partir de entonces le espera un tratamiento durante dos años para perder otros 100 kilos y quedarse en un peso aproximado de 80”.
Para conseguir esta pérdida de peso se le ha realizado un by-pass gástrico de asa larga. Una operación realizada por laparoscopia y estandarizada por el Dr. Ballesta y su equipo, que consiste en reducir la capacidad del estómago a 50 ml y producir un salto en la absorción de los alimentos de casi cinco metros en el intestino delgado. “Es una operación mixta, pues reduce la capacidad del estómago y limita la absorción de los alimentos en el intestino, permitiendo perder peso sin crear déficits nutricionales ni hormonales” explica el propio Dr. Ballesta.
Manoli, una joven onubense que debido a su grave obesidad había tenido que dejar su trabajo en una fábrica de conservas de su localidad, acudió a la ciudad de Granada para ponerse en manos de este eminente cirujano, que dirige el Centro Laparoscópico Dr. Ballesta y que recientemente ha abierto su centro en la Clínica Inmaculada de la ciudad nazarí. “Era mi última esperanza de tener una vida normal. Cuando ando diez metros me tengo que parar, me asfixio y no puedo respirar” declaró la joven antes de entrar en quirófano. La andaluza, atrapada en su propio cuerpo debido a su excesivo peso, 260 kilos, apenas podía moverse, subir escaleras, salir a la calle o realizar cualquier actividad propia de una chica de su edad.
La joven podrá tener hijos en el futuro inmediato y realizar una vida completamente normal desde las próximas semanas. “Al realizarse por laparoscopia, la recuperación es muy rápida, la agresión mínima y la paciente podrá volver a su domicilio en los próximos días” concluyó el cirujano.