La Policía Local de Motril ha detenido a un hombre de 43 años “por violar repetidamente” una orden de alejamiento que le prohíbe acercase a su expareja y por agredir a un vecino para después robar su vehículo.
Los hechos ocurrieron poco antes de las 23,00 horas del domingo, cuando una patrulla que se encontraba de servicio en las inmediaciones de la avenida de Nuestra Señora de la Cabeza de la localidad costera fue requerida por una mujer que se encontraba en el paseo de las Explanadas, según informa en una nota la Policía Local de Motril.
Al acercarse al lugar, les explicó que estaba asustada porque su expareja, sobre la que recae una sentencia que le prohíbe acercarse a menos de 300 metros de ella, la estaba esperando a poca distancia, sentado en un banco.
Además, les indicó que el hombre irrumpe a diario en su domicilio de forma violenta, habiendo llegado esa misma tarde a destrozar algunos muebles. “Me siento intimidada y amenazada por él”, confesó la mujer a los agentes.
De igual modo, les manifestó que hacía pocas horas que este individuo había sustraído un coche tras propinar una paliza a su dueño, si bien se había visto obligado a abandonarlo en plena vía pública al quedarse sin combustible.
Cuando los agentes se personaron en casa del legítimo propietario del vehículo para devolverle las llaves del mismo, éste les confirmó que en efecto había sido agredido, pero que no quiso denunciar el robo ni la agresión porque le tiene “miedo” al ahora detenido, procediendo la Policía Local a su traslado al servicio de Urgencias del hospital de Motril.
A este respecto, el concejal de Seguridad en el Ayuntamiento de Motril, Manuel Ballesteros, ha felicitado al cuerpo de la Policía Local por “el gran trabajo que realizan a diario para salvaguardar la integridad y bienestar de todos los vecinos y visitantes del municipio”, especialmente en Semana Santa, cuando la afluencia de turistas hace necesario incrementar las labores de cuidado y vigilancia.