Los servicios de limpieza del Ayuntamiento de Granada han retirado de las calles de la ciudad unos 140 kilos de cera, es decir un 30 por ciento menos que el año pasado, en el que se recogieron 200. En esta reducción ha influido la lluvia que impidió salir a algunas procesiones. Asimismo la lluvia ha tenido influencia en la recogida de residuos urbanos durante la pasada semana, en la que se retiraron 200 toneladas, un 10 por ciento menos que el año anterior. Para el plan especial de limpieza de la cera, Inagra ha contado con 25 operarios, que pudieron adelantar el inicio de su tarea al mediodía de ayer. Según el concejal de medio ambiente, Juan Antonio Mérida, este año la retirada de cera de las calles ha sido más rápida.
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La limpieza del recorrido procesional se finalizó sobre las once de la noche de ayer, incluida la calle San Matías, con lo que se restableció el tráfico en todas las vías. El resto del recorrido oficial de las procesiones y las zonas peatonales, como Mesones o alrededores de la Catedral, especialmente Pasiegas, se terminarán de limpiar de cera el miércoles, una vez que se retiren las tribunas. Una media de 45 operarios del personal de limpieza se dedicaron a reforzar las labores de limpieza, riego de calles y recogida de residuos durante los días de mayor afluencia de público en las calles. Asimismo se repartieron 20.000 bolsas para las cáscaras de pipas, por las tribunas y el recorrido oficial de las procesiones religiosas.