La delegada del Gobierno andaluz en Granada, María José Sánchez, ha defendido la puesta en marcha del metro como fórmula para solucionar “un problema tan grave como la movilidad” y ve “un error” que se busque la confrontación en este asunto, después de que el presidente de la Diputación y del PP granadino, Sebastián Pérez, haya dudado de la viabilidad de la infraestructura.
En declaraciones a los periodistas, Sánchez ha señalado que si “en un año” no está finalizado el metro, tal y como prevé el Gobierno andaluz, “sería muy difícil el acceso al Parque Tecnológico de la Salud (PTS), a los nuevos hospitales y a las zonas comerciales que va a haber en la zona sur”.
Además, la delegada ha abogado por “unir esfuerzos, buscar soluciones conjuntas a los problemas” y evitar los “puntos de confrontación”: “Ahí a la Junta y a esta delegada no la van a encontrar”, ha subrayado.
En el mismo sentido se han pronunciado desde otros lugares de la provincia, como el Ayuntamiento de Armilla (Granada), que ha mostrado en un comunicado su “estupor” después de que el presidente del PP de Granada haya dicho que el metro será “un fiasco que no durará más de dos años” y lo haya comparado con el antiguo tranvía de Granada.
Desde Armilla –uno de los municipios por donde discurrirá el metro– han tachado de “irresponsables” estas declaraciones, al considerar que el metro fue “una importante reivindicación de todas las fuerzas políticas y sociales granadinas como solución a los graves problemas de movilidad que padece la ciudad y su área metropolitana”.
Una situación que para el Ayuntamiento de Armilla, gobernado por el PSOE, “no se parece en nada” con la que había a finales de los años sesenta, cuando se adoptó “la errónea decisión de suprimir el tranvía de Granada”.
Por su parte, el alcalde de Maracena, otra de las cuatro localidades por las que transcurrirá el metro con un 98 por ciento de ejecución de la obra, ha mostrado “su profundo malestar” por lo que considera “un ataque, ya no sólo a los municipios afectados, sino en general a una infraestructura vertebradora del Área Metropolitana”.
Para el regidor de Maracena, Noel López, “es incomprensible que el presidente de Diputación desvirtúe de forma tan infundada y a los seis años del inicio de su construcción una infraestructura que vendrá no sólo a apostar por la movilidad sostenible sino que supondrá un vehículo de dinamización de la economía de Maracena así como de Armilla y Albolote por su interconexión y por su enlace con la capital”.
“Entre las funciones propias del cargo de presidente de Diputación no se encuentra la de desprestigiar o actuar como agorero”, protesta López, “y mucho menos la de trabajar contra los municipios teniendo en cuenta que se trata del máximo representante de una institución cuyo cometido fundamental es el de crear provincia”, ha clamado.