‘SECRETOS EN REUNIÓN’

Cuando dos niños eran sorprendidos cuchicheando por lo bajini para que resto de la pandilla no se enterara de lo que decían, eran merecedores de un coro unánime de reproches al grito de “Secretos en reunión son una falta de educación”. El mismo reproche corregido y aumentado, cabe dirigir a los Presidentes del Gobierno y la Generalitat, quienes hace una semana se reunían en secreto, es de suponer que para que Rajoy flexibilice el objetivo del déficit para Cataluña que en este 2013, supondría que Artur Mas tuviera que recortar 4.400 millones de euros.

En Democracia, un Jefe de Gobierno, no puede mantener una agenda secreta, porque  su responsabilidad está sometida al control del Parlamento, el cual difícilmente podrá exigirla si las acciones del Presidente no son públicas y transparentes.

En Andalucía, nos da exactamente igual, que Mas quiera acudir en secreto a la Moncloa para no poner en peligro su acuerdo de gobierno con ERC, pero lo que no nos da igual son los acuerdos secretos a los que hayan podido llegar los dos presidentes y que sin duda son de carácter económico.

Tras el acuerdo del Consejo de Política Fiscal y Financiera para marcar objetivos de déficit distintos para cada Comunidad Autónoma y la disposición de Rajoy de flexibilizar ese fatídico 0,7 a Cataluña, urge saber, si esa buena disposición es también extensiva a Andalucía, donde el esfuerzo que se está realizando para mantener los servicios públicos esenciales, no tiene parangón con ninguna otra comunidad.

Porque nos da lo mismo que Rajoy quiera emular o no, a José María Aznar hablando catalán en la intimidad, no nos lo da que el Presidente del Gobierno no sea transparente con el dinero público porque incurrir en agravios territoriales comparativos en los tiempos que corren, sería muy difíciles de explicar.