¿Se imagina que las fiestas de Moros y Cristianos de Zújar, Cúllar y Benamaurel fueran declaradas (como el resto de fiestas similares) Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO? Pues el camino ya ha comenzado para tal consecución.
Con un lleno total del Auditorio Enrique Pareja de la ciudad de Baza y la asistencia de los alcaldes de los municipios mencionados, Benamaurel (como sede del Sur Peninsular) el sábado 6 de abril el acto de Presentación en Andalucía de la Candidatura para la Declaración de las Fiestas de moros y cristianos como Patrimonio Cultural Inmaterial de la humanidad bajo la coordinación de Carolina Espín, Concejala de Cultura de dicha localidad y el escritor, miembro del Comité Ejecutivo para dicha candidatura, Miguel Ángel Martínez Pozo.
Presentado por el periodista de Radio Granada, Rafael Troyano, quien destacó la importancia de tal evento como muestra de la importancia de dicha fiesta en Andalucía, especialmente en lo que fue el Antiguo Reino de Granada, dio paso a los diferentes interventores comenzando por el apoyo de dicha candidatura, a través de vídeoconferencia, del Presidente e Imam de la Comunidad Islámica de El Salvador, en Hispanoamérica, Dr. D. Armando Bukele Kattán resaltando la importancia de esta fiesta internacional como un acercamiento, confraternización, hermanamiento entre estas dos culturas y/o religiones que convivieron durante siglos y conviven en la actualidad dentro de un mundo globalizador donde es importante conservar las señas de identidad de una población o territorio.
También intervinieron, D. Álvaro Rodríguez, Vice-Presidente de la Unión Nacional de Entidades Festeras quien destacó la función de dicha asociación como asesora de las diferentes localidades festeras y su trabajo de conservación de la fiesta en sí, así como D. José Osuna Expósito, Presidente del Club Unesco para el Patrimonio Intangible de Civilizaciones Antiguas quien señaló la importancia de esta declaración y el proceso que conlleva de documentación, trabajo y esfuerzo. Ambos destacaron la importancia de cada fiesta en sí donde las peculiaridades, singularidades de cada unas de ellas las hacían grandes no importando el número de habitantes ni el número de festeros sino el aspecto histórico, cultural y antropológico de estas.
A su vez, Juan Francisco Sanjuán, hizo entrega de la marcha mora “Avenmoriel. Huella del Milenio del Reino de Granada” al pueblo de Benamaurel quien explicó el origen de esta y un breve análisis musicológico. Francisco José Martínez, Presidente de la Agrupación Musical Benzalema, agradeció su aportación a la cultura musical de Benamaurel y le invitó a dirigirla por primera vez en el Certamen de Bandas de Música del presente año que tendrá lugar en Agosto Cultural.
Para finalizar, intervino Juan Francisco Torregrosa quien subrayó la necesidad de aunar fuerzas todas las poblaciones andaluzas, la importancia de esta fiesta en la Comarca de Baza y sus más sinceros agradecimientos a la UNDEF y CLUB UNESCO por contar con un benamaurelense como miembro del Comité Ejecutivo y con el pueblo de Benamaurel como Sede del Sur Peninsular ofreciéndoles sus instalaciones y medios disponibles para actos, eventos y reuniones que tengan que realizarse para la consecución de dicha declaración. Destacó, además, la importancia de las Fiestas de Moros y Cristianos en la comarca de Baza, y la necesidad de unión entre Benamaurel, Cúllar y Zújar en su mejora y promoción, buscando lo que une a los tres municipios.
Clausuró el acto Ana Gámez Tapias, Delegada de Educación y Cultura en Granada de la Junta de Andalucía quien señaló el carácter histórico, cultural, antropólogico de la fiesta como un rico patrimonio y legado de muchas localidades granadinas y andaluzas, siendo la principal Huella del Milenio del Reino de Granada.
Benamaurel, una vez finalizado, invitó a descubrir en dicho acto una emocionante aventura llena de suspense y acción que nos trasladó más allá de la realidad a través del contenido del autosacramental “Cautiverio y Rescate de Ntra. Sra. de la Cabeza”, conocido popularmente como “Los Papeles”. Una representación legendaria que identifica a dos poblaciones del antiguo Reino de Granada, Benamaurel y Zújar, y que continúa conmoviendo, generación tras generación, a niños y mayores de todas las edades durante los días festivos de ambas localidades y que, dicho día, fue representada por ser, tal y como explica Miguel Ángel Martínez Pozo, “un claro ejemplo de las fiestas del sur peninsular y, cómo no, de la Comarca de Baza; no solo por ser nexo de unión junto a la Virgen de la Cabeza de Benamaurel y Zújar que compartieron la subida al cerro Jabalcón durante siglos, sino por haber influido notablemente en otros textos de localidades andaluzas y, a su vez, por ser considerada las fiestas de moros y cristianos de mayor contenido literario de cuantas se celebran en España.”