La alcaldesa de Arenas del Rey (PSOE) defiende su actuación y pide al PP que “cese su caza de brujas”

La alcaldesa de Arenas del Rey, Francisca García Moreno (PSOE), ha defendido este miércoles su actuación después de que el PP haya pedido su dimisión por presuntamente utilizar el Ayuntamiento de la localidad en beneficio propio para construirse una vivienda en terrenos que no le pertenecían y ocupando viales y zonas verdes municipales.

Asimismo, ha pedido a los ‘populares’ que cesen su “caza de brujas” y ha criticado el “acoso” al que la está sometiendo “desde hace diez años” con “continuas infamias”.

La secretaria de Organización del PSOE granadino, Elvira Ramón, ha subrayado que la regidora no está acusada en ninguna causa y ha mostrado su confianza en que la alcaldesa “ha actuado correctamente”. Además ha criticado el proceder del PP, “que se dedica a interponer denuncias basadas en infamias para obtener titulares”. “Somos respetuosos con la Justicia y esperamos que resuelva cuanto antes la denuncia del PP”.

Para Elvira Ramón, es “inadmisible que el PP y Sebastián Pérez pretendan dar lecciones con el diputado y alcalde de Gójar Francisco Maldonado, que fue denunciado por la Fiscalía por supuestos delitos de tráfico de influencias, prevaricación y contra la administración pública”. “Ese señor que pretende dar lecciones de moralidad está imputado por participar en la firma de un convenio en representación del Ayuntamiento de Gójar con su empresa familiar, Promociones Cavifer”, ha considerado.

La secretaria de Organización del PSOE ha recordado que la imputación de Maldonado se produce después de que se apreciaran indicios de delito en sus actuaciones como regidor para favorecer supuestamente a la constructora de su hermano con la aprobación y firma de un convenio urbanístico, sin la publicidad legalmente exigida, en perjuicio de las arcas municipales. Además, según Elvira Ramón, el alcalde de Gójar y diputado provincial del PP ocultó su relación con la empresa Cavifer, de la que su hermano es administrador mancomunado y creó una ficción urbanística para que la constructora obtuviera la gratuidad total de todas las tasas municipales de la operación urbanística.

“Es de caraduras y de sinvergonzonería política que alguien con esos antecedentes, como el señor Maldonado, pretenda dar lecciones y pedir dimisiones cuanto tendría que explicar públicamente cómo urdió la operación urbanística para favorecer a la constructora de su hermano”, ha añadido Elvira Ramón.