Fray Juan José Hernández, impuso este domingo a la Virgen de la Esperanza la reliquia de San Juan de Dios antes de que la imagen de fuese trasladada a su paso de palio para su participación en la Magna Mariana.
Concluida la vestimenta de la imagen de la Virgen de la Esperanza, la imagen fue trasladada al altar de la iglesia de Santa Ana. Tras la lectura de la Palabra, el rector de la basílica de la Orden Hospitalaria, en una breve reflexión señaló que “el relicario en el pecho de la Virgen nos ha de recordar que la caridad es la esperanza de los más necesitados. El lucero que es el relicario, en la Virgen, que es un lucero, ha de ser el lucero de esperanza de la caridad del cristiano”.
Bendecida la cruz relicario, fray Juan José impuso la pieza conteniendo el resto óseo de San Juan de Dios a la Virgen de la Esperanza. Igualmente, leyó el documento de concesión de la reliquia a la cofradía y se dio inicio al besamanos. Finalizado el mismo, la imagen fue traslada a su paso con el canto de la salve y las letanías de la Virgen.
Francisco Fernández, hermano mayor de la cofradía hizo entrega al rector de la Orden Hospitalaria de un cuadro en que se recoge un trozo de terciopelo del manto original de Casa Garín para la Virgen de la Esperanza.