El informe de consultas previas que la Junta ha remitido al Consorcio de la Ragua considera que las actuaciones de nueva ejecución previstas para la Universiada, como nuevas pistas de esquí de fondo, la instalación del campo de tiro para biathlón o dispositivos de producción de nieve artificial, podrían suponer una afección al entorno natural que haría no recomendable la iniciativa, “tal y como está concebida en estos momentos”.
Este informe elaborado con la aportación de 33 entidades diferentes, al que ha tenido acceso Europa Press, se refiere a los 15 tipos de actuaciones propuestas por el Consorcio de la Ragua para celebrar las pruebas de esquí de fondo y biathlón en este entorno enclavado en el Parque Nacional de Sierra Nevada y declarado Reserva de la Biosfera.
Así, en el informe emitido por el equipo de gestión del Espacio Natural se indica que la actividad de esquí nórdico “es compatible desde el punto de vista de la normativa ambiental en las instalaciones que ya existen en la Ragua”, al igual que las pruebas competitivas de deportes de invierno.
No obstante, se advierte de que para que este proyecto pueda ser sometido al procedimiento de Autorización Ambiental Unificada deberá adecuarse al régimen jurídico del Espacio Natural. Para ello, se considera “fundamental” la utilización de pistas ya existentes en la estación, “sin contemplar modificaciones de trazado o incrementos de la anchura de la plataforma que provoquen movimientos de tierra”.
También se requiere el uso de las explanadas existentes, sin nuevos movimientos de tierra , para el emplazamiento del Campo de Tiro de Biathlón y contar con las condiciones naturales de nieve; esto es, no instalar dispositivos de producción de nieve artificial.
Además, el documento aboga por apoyar el suministro eléctrico en “infraestructuras ya existentes”, descartando las opciones de crear una subestación de 66Kv y una planta de biomasa.
En este sentido, y una vez analizado al detalle el documento de memoria-resumen aportado por el consorcio, el informe mantiene que “las actuaciones de nueva ejecución, fundamentalmente la construcción de nuevas pistas de esquí de fondo, el ensanche de la parte de las existentes, la instalación de un campo de tiro para biathlón y la disposición de infraestructuras para la producción de nieve artificial, podrían suponer una afección directa a la zona núcleo de Reserva de la Biosfera que puede no hace recomendable dicha iniciativa, tal y como está concebida en estos momentos”.
Del mismo modo, el documento señala que estas actuaciones pueden presentar “elementos de incompatibilidad” con los principios que rigen en este entorno natural y con la normativa vigente, consideraciones que se deberán tener en cuenta en el proyecto final que sea sometido al procedimiento de Autorización Ambiental Unificada.
“ES DIFÍCIL”
El Consorcio de la Estación Recreativa del Puerto de la Ragua ya ha recibido el informe y sus técnicos “están estudiándolo” para intentar adaptar el proyecto a las exigencias medioambientales.
No obstante, el organismo ha reconocido esta pasada semana, en declaraciones a Europa Press, que es “difícil” hacerlo y compatibilizar la pretensión inicial de que la Universiada deje un legado de instalaciones que revitalicen esta comarca “deprimida”.
Pese a ello, las mismas fuentes han garantizado que se trabaja para seguir las instrucciones de la Junta y confían en alcanzar un acuerdo para que las pruebas se queden en la Ragua, dado que la alternativa es que se celebren en la estación de esquí de Candanchú (Huesca) según lo acordado con la Federación Internacional de Deporte Universitario (FISU).