Dos días después de que unas 150 personas convocadas por el Partido Comunista de Andalucía (PCA) ocuparan una finca de la Junta de Andalucía ubicada en Moclín para reivindicar la puesta en marcha de un banco de tierras públicas para el uso solidario de los agricultores; Asaja Granada ha reprobado la actuación.
Asaja Granada en su día mostró su apoyo a la Plataforma Ciudadana creada con el fin de que la finca Cortijo Enmedio se parcelara y se ofreciera a la venta a los vecinos de los anejos de Tiena y Olivares para su explotación directa en lugar de que se cediera en arrendamiento al Ayuntamiento de Moclín. Esta organización agraria asegura en un comunicado que “nunca se ha posicionado a favor del reparto gratuito de las tierras y mucho menos de una ocupación”.
Con la publicación del Decreto Ley 512010 de 27 de julio por el que se aprobaron medidas urgentes de reordenación del sector público que implicaban la enajenación de las fincas públicas adscritas al antiguo IARA el caso de la finca El Cortijo Enmedio se quedaba sin definir al no sacarse entre los bienes a subasta. La Junta de Andalucía no se pronunciaba expresamente pero el Ayuntamiento de Moclín sí tenía entre sus planes que la Junta de Andalucía se lo cediera en arrendamiento para a su vez gestionarlo mediante un ente público.
Ante esta circunstancia ASAJA GRANADA mostró su apoyo a la Plataforma Ciudadana por la Defensa, Parcelación y Reparto de la finca del Cortijo Enmedio con el fin de que los agricultores de los anejos de Tiena y Olivares, donde se ubica la citada finca de 280 has, pudieran adquirir parcelas previamente divididas antes de que se vendiera a una entidad pública (como así parecía) o incluso privada. Expusimos que la fórmula de cesión en arrendamiento, como cualquier otra experiencia de titulariza pública para el cultivo de tierras, era inviable, y que la explotación directa por parte de los agricultores era la manera de sacarle más rendimiento. En ningún caso esta organización agraria apoya el reparto gratuito de las tierras y mucho menos una ocupación, que considera reprobable.