“La conciencia intercultural (Cross-cultural awareness) en la resolución de crisis y conflictos” es el título del libro que, con edición de los profesores de la UGR Concepción Pérez Villalobos (Departamento de Derecho Constitucional) y Humberto Trujillo Mendoza (Departamento de Metodología de las Ciencias del Comportamiento), han editado conjuntamente el Mando de Adiestramiento y Doctrina (MADOC) y la Editorial de la UGR (eug) en la colección “Biblioteca Conde de Tendilla”.
La obra es en realidad un manual práctico que recoge las ponencias que fueron presentadas en un curso homónimo, organizado por el Centro Mediterráneo de la Universidad de Granada, con la participación de especialistas universitarios y de las Fuerzas Armadas.
El volumen se acerca, así, a la interculturalidad, con una visión integradora de disciplinas tan diversas como la antropología, la psicología, la ciencia política, el derecho, la educación, la economía y otras, que sin duda aportarán un abundante caudal de conocimientos y de relaciones a todos los interesados en este asunto.
El libro, de 290 páginas, cuenta con un prólogo a cargo de Fernando Fernández Bastarreche y José Antonio Vergara Melero, coordinadores del Centro Mixto UGR-MADOC; una introducción de los editores, Concepción Pérez Villalobos y Humberto Trujillo Mendoza; y cuatro capítulos titulados, respectivamente: “La conciencia intercultural en el actual contexto de seguridad”, “Dimensiones de la conciencia intercultural”, “La conciencia intercultural aplicada: estudios de caso” y “La conciencia intercultural en las políticas de las organizaciones y en su enfoque operativo”.
Según los coordinadores, existe en la actualidad un amplio consenso respecto de que las misiones internacionales y las operaciones que le son propias “hay que encuadrarlas en lugares concretos y dentro de unas sociedades con sus propias circunstancias y características culturales e idiosincráticas, de manera que los conflictos no deben ni pueden resolverse aplicando exclusivamente criterios militares, sobre todo si estos son de tipo asimétrico y difuso. Esto significa que para prevenir el conflicto, resolverlo y construir sociedades democráticas y estables, se necesita de un acertado y exhaustivo entendimiento de la sociedad concreta que se quiere gestionar, interactuar adecuadamente con los actores locales que la constituyen y, por tanto, poder contar con la colaboración activa de la población a la que se pretende ayudar”.