Según los datos ofrecidos por la Guardia Civil en lo que va de 2013 diez mujeres han denunciado en Pinos Puente a sus parejas por violencia de género. En nueve casos la autoridad judicial impuso a los agresores órdenes de alejamiento para protegerlas. El año pasado se registraron en el municipio 17 denuncias, catorce con orden de alejamiento. La Guardia Civil valora periódicamente el riesgo que padecen las mujeres que han denunciado y tiene registrados en la actualidad 17 expedientes con medidas especiales de amparo, que imponen al inculpado la salida de sus domicilios familiares o incluso la prohibición de residir en un determinado lugar cercano a su ex pareja.
El protocolo que se sigue en los casos de violencia machista se ha dado a conocer por representantes de la comandancia de la Guardia Civil de Pinos Puente, que han participado en la jornada “Tejamos redes contra la violencia machista”. Francisco Durán ha señalado que “nuestra labor principal es dar protección a las víctimas y que se sientan seguras. Es muy importante que sepan que no hay medidas penales sin una denuncia previa”.
Expertas en psicología, derecho y representantes de la Plataforma Andaluza de Apoyo al Lobby Europeo de Mujeres han abordado la lacra social que supone la violencia de género. Rafaela Pastor, presidenta de la Plataforma, considera que “hay que aprender a ser individuas de plenos derechos porque las mujeres seguimos siendo ciudadanas de segunda”. El encuentro ha servido para dar a conocer la importancia que tiene el apoyo psicosocial a las víctimas, que llegan a estar atemorizadas y aisladas de su entorno próximo. El primer paso es ayudar a comprender a la mujer maltratada que lo que le sucede no es normal.
Al encuentro, celebrado en el edificio del Alambique de Pinos Puente, han acudido representantes del Centro Municipal de Información de la Mujer, miembros de la Guardia Civil y mujeres de distintas asociaciones del municipio. El alcalde de Pinos Puente, Enrique Medina, ha inaugurado las ponencias y ha hecho hincapié en que muchas situaciones de violencia hacia las mujeres están desencadenadas por educar de forma diferente a niños y niñas. “Yo siempre me he ocupado de las tareas domésticas y animo al resto de los hombres a hacer lo mismo”, señaló.