 |
Violencia de género: El asesino confeso de Ángela sigue en el hospital y mañana pasará a disposición judicial
El hombre de 37 años que confesó ayer haber matado a su expareja, una joven de 29 años, en el domicilio en el que convivían antes de que iniciaran los trámites de separación permanece desde ayer bajo custodia policial en un hospital de Granada.
El hombre, O.C.T., sufre diversos golpes, uno de ellos en el cráneo, como consecuencia probablemente de un intento de suicidio en el peñón de San Cristóbal de Almuñécar hasta donde se desplazó después de que supuestamente matara a su expareja en Granada.
Según han informado a Efe fuentes sanitarias, el presunto autor de los hechos continúa ingresado bajo custodia policial en un hospital de Granada para ser sometido a una serie de pruebas y radiografías.
Una vez que reciba el alta será trasladado a dependencias policiales para prestar declaración, tras lo cual será puesto a disposición judicial, lo que no ocurrirá hoy dado que aún permanece en el centro hospitalario, según fuentes policiales.
Los hechos ocurrieron ayer en el domicilio de Granada que la pareja compartió antes de que iniciaran los trámites de separación.
Allí, la Policía Nacional halló muerta a la joven con varias puñaladas y signos de estrangulamiento.
Aunque la víctima ya no convivía con su expareja, ambos se habían citado en el que fue el domicilio conyugal para tratar algunos asuntos relacionados con el piso y los trámites de separación.
El hallazgo se produjo después de que un amigo de la víctima, con la que al parecer compartía piso, diera aviso a la Policía después de que llamara insistentemente a la fallecida sin que le cogiera el teléfono y al temer lo peor dado que sabía que la víctima había quedado con su expareja.
De forma paralela, la expareja de la víctima fue localizado de madrugada por la Policía Local de Almuñécar con golpes y magulladuras en las inmediaciones del peñón de San Cristóbal, donde al parecer había intentado suicidarse.
La detención de este hombre, que llevaba el teléfono móvil y la tarjeta de crédito de su expareja, se desencadenó después de que en una de las llamadas que hizo la Policía Nacional al móvil de la víctima, lo cogiera uno de los agentes de Almuñécar, que relató la situación.
La joven fue trasladada ayer a Almadén (Ciudad Real), de donde era natural, para ser enterrada hoy en esa localidad.
La Diputación de Granada ha secundado hoy una concentración de repulsa por esta muerte, durante la que el portavoz del gobierno provincial, José Torrente, ha rechazado el “asesinato vil de una mujer que cometió el delito de dejar el amor aparcado”.
