Los investigadores de la Estación Experimental del Zaidín (EEZ), instituto del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) en Granada, afirman que este organismo se encuentra en una “situación límite” ante el déficit de financiación que sufre por parte de la administración en los últimos años.
Los investigadores del centro han manifestado en un comunicado su “profunda preocupación” por la situación general del CSIC y han querido alertar sobre “las consecuencias que a corto y medio plazo va a generar esta carencia de fondos sobre la actividad científica”.
La reducción que ha experimentado el organismo alcanza el 40 por ciento de su presupuesto de funcionamiento, lo que ha supuesto dejar de percibir unos 500 millones de euros desde 2008 para el principal organismo dedicado a la investigación en España, responsable de un 20 por ciento de la producción científica nacional, según señalan. Defienden además que la EEZ es un centro altamente competitivo dentro del área de Ciencias Agrarias del CSIC, constituido por casi 300 trabajadores.
Además de los proyectos de investigación nacionales e internacionales que desempeñan sus investigadores, participan en numerosos programas que interaccionan con la sociedad granadina y andaluza, generando conocimientos básicos y también aplicados que puedan tener un impacto positivo en la sociedad.
Sin embargo, “la decisión de la presidencia del CSIC de limitar el crédito de los institutos debido al colapso económico de la institución está afectando a su actividad de forma muy notoria al impedirles acceder a los fondos externos que han captado”.
Añaden que la “parálisis económica” a la que se ven sometidos los centros del Consejo está limitando la capacidad de funcionamiento y de contratación de personal, lo que podría desembocar en una situación “límite”, con el cierre del instituto a finales de septiembre de 2013.
A su juicio, estas “graves” consecuencias podrían aliviarse mediante el aporte inmediato de la liquidez ya comprometida por parte del Ministerio de Economía y Competitividad del que dependen estos investigadores, unos 75 millones de euros. Sin embargo, sólo la generación de un plan estable de financiación por parte del CSIC garantizaría la continuidad a medio y largo plazo.
En caso contrario, advierten de que los efectos negativos serían muy amplios y afectarían también a empresas cuya actividad económica está asociada de forma directa o indirecta a la labor de los investigadores. Los investigadores de la EEZ creen que instituciones como este centro de investigación en Ciencias Agrarias son “indispensables para generar un nuevo modelo económico sobre la base de la investigación y el desarrollo y para que éstos sean un verdadero motor de la innovación en nuestro país”.