La localidad granadina de Píñar ultima los preparativos para celebrar su tradicional Fiesta de la Prehistoria, con la que se pretende promocionar la Cueva de las Ventanas, habitada desde la época del hombre de neandertal y en la que todo el pueblo se ambienta para la ocasión.
El viernes 2 de agosto será el gran día de esta fiesta troglodita, aunque desde el pasado 29 de julio se están calentando motores con la puesta en marcha de una semana cultural con diversas actividades. Este pueblo de la comarca de los Montes Orientales pone en marcha cada año durante esta semana cultural la ‘europiedra’, una moneda con la que se puede pagar en cualquier establecimiento de la localidad.
Con motivo de esta festividad, todo el pueblo se ambienta en la época troglodita con abalorios prehistóricos y ropas hechas a base de pieles que el Ayuntamiento facilita a todo el que quiera unirse a la celebración, también a los foráneos que se acerquen a Píñar. Además, durante todo el día hay actividades como talleres de fabricación de armas prehistóricas, herramientas, alfarería cerámica, creación de fuego y confección de collares, entre otros.
También hay diversas exhibiciones, como el tiro con azagayas y concursos como el de clanes prehistóricos, donde los piñeros se constituyen en grupos pequeños para revivir la rivalidad ancestral de las comunidades que habitaban el término municipal hace miles de años.
A todo ello se unirá una Exhibición de Gastronomía Prehistórica realizada por el taller de empleo ‘Píñar restauración’.
PASACALLES
Por la tarde, un pasacalles con batucada recorrerá las principales calles poniendo a todo el pueblo en el centro de la fiesta para llegar a la noche, cuando se degustará una barbacoa prehistórica a base de carnes. Posteriormente, se celebra una danza multitudinaria amenizada por un dúo musical hasta bien entrada la madrugada.
Este año, del 12 al 18 de agosto, se organizará un festival en el auditorio de la Cueva de las Ventanas que será el colofón de estas celebraciones culturales que se vienen desarrollando en Píñar desde el 29 de julio. Cada año, la celebración va incrementando el número de visitantes, así como la participación de los vecinos, con lo que ya se ha convertido en un punto de encuentro obligatorio para los vecinos de toda la comarca, así como de los emigrantes que retornan a la localidad por vacaciones.
Este evento debe su existencia fundamentalmente a que en el pueblo existe la cueva de la Carihuela y la cueva de Las Ventanas, donde hubo asentamientos humanos del neolítico. Uno de los hallazgos más importantes en la cueva de la Carihuela fue el cráneo de un neandertal. La gran repercusión mediática de este evento en todos los medios de comunicación sirve a su vez para potenciar las visitas a la Cueva de las Ventanas, abierta al público desde hace años.