En julio de 2013, el IPC ha bajado un 0,9% en Granada (con una diferencia de 0,3 puntos respecto al mismo mes de 2012, en el que el IPC bajo un 0,6%). En la provincia, los grupos de bienes y servicios que más han subido respecto al mes pasado han sido bebidas alcohólicas y tabaco (2%), ocio y cultura (1,8%) y transportes (1,3%) mientras que han disminuido sus precios durante el mes pasado el vestido y calzado (-14,8), seguido de comunicaciones (-1,2%) y medicina (-0,9%). En la variación de los últimos doce meses, destaca la subida de precios en enseñanza (10,5%), bebidas alcohólicas y tabaco (5,8%) y alimentos y bebidas no alcohólicas (5,3%), mientras que ha bajado el precio de comunicaciones (-3,5%) y de ocio y cultura (-1,6%). En lo que va de año, destaca la bajada de precios en vestido y calzado (-17,2%) y comunicaciones (-4,7%), mientras que aumenta el precio de las bebidas alcohólicas y tabaco (5,1%) y los alimentos y bebidas no alcohólicas (2,7%)
Emilio Del Pino, Sª de Empleo y Relaciones Laborales de UGT Granada, opina que la bajada de precios en julio, debido al periodo de rebajas, es sólo un respiro momentáneo para los bolsillos de los granadinos, pero que no mejora la situación. Las subidas de impuestos, tanto directos como indirectos (IVA, IRPF, IBI), que se han producido en el último año, así como a los incrementos en las tasas, los repagos farmacéuticos el incremento de tasas en la educación, y la subida de los carburantes, están afectando significativamente al nivel de vida de los ciudadanos.
En cualquier caso, el representante de UGT ha recordado que en un contexto de recesión como el que nos encontramos, con acusadas caídas de la producción, de la inversión y, especialmente, del consumo, los precios han evolucionado a un sorprendente ritmo de crecimiento, no demasiado acorde con lo que debería de haber sido su evolución según marca la teoría económica. A su juicio, ello es debido en gran parte, al importante déficit regulador que existen en buena parte de los sectores económicos, en los que las empresas actúan en posiciones de ventaja que les permiten fijar precios y eludir el libre juego de la oferta y la demanda, lo que repercute directamente sobre los consumidores.
Situación que se agrava al verse acompañada por la innecesaria y errónea estrategia del Gobierno, basada en la devaluación salarial y la pérdida de derechos, consecuencia de una reforma laboral que ha deteriorado aún más el mercado de trabajo, facilitando la destrucción de empleo y haciendo que se aumente el ya de por sí elevado desempleo. En definitiva, para Emilio Del Pino estamos asistiendo a una política económica desarrollada por el Gobierno que ha dado la espalda a los ciudadanos y que se está mostrando totalmente ineficaz y contraproducente, que carga los ajustes sobre los trabajadores y ciudadanos, favoreciendo la acumulación de capital en unos pocos, y que no sólo no está ayudando a la recuperación económica, sino que está provocando efectos negativos, ahondando más en la recesión.
Por ello, el representante de UGT reitera la petición de un cambio en las políticas económicas del Gobierno, que inviertan sus objetivos desde el control del déficit y la consolidación fiscal hacia las tan necesarias medidas expansivas de estimulo a la actividad económica y el empleo. Unas políticas, ha concluido el ugetista, que repartan los costes de la crisis y que permitan sentar las bases para la recuperación, apostando por los ciudadanos y los trabajadores y no, tal y como ha venido sucediendo hasta ahora, denostándoles y eliminando sus derechos.