La localidad de Deifontes ha cuantificado en 600 hectáreas de olivos y 25 kilómetros de caminos rurales los afectados por las riadas del pasado 28 de agosto y que se cobraron la vida de un vecino que circulaba con su vehículo momentos antes de que fuese arrastrado por la corriente.
Según ha informado a Efe el alcalde del municipio, Francisco Abril, la zona más afectada es la vega, lo que complica la situación laboral de los 3.000 ciudadanos de la localidad, al vivir en un 80 por ciento de la agricultura.
“Hemos perdido las expectativas que se habían creado”, ha dicho Abril en alusión al hecho de que este año se esperaba una buena cosecha y, por tanto, beneficio para los parados del municipio, cuya tasa asciende al 40 por ciento.
Aunque aún se está a la espera de que se cuantifique la cifra total de los daños que se produjeron en Deifontes, el alcalde ha adelantado que en el Parque Natural de El Nacimiento se han producido unos 400.000 euros en pérdidas, ya que fue una zona que hace solo dos años fue reformada por completo con la inversión de 300.000 euros.
Además el regidor se ha mostrado especialmente preocupado por la situación del puente del Arroyo de la Playa, principal vía de acceso al municipio desde la A-44 y que tiene limitado el paso a vehículos ligeros, sin que por él puedan transitar camiones.
Esto provoca que desde las bodegas de aceite no se pueda dar salida directa a los productos o que camiones con hormigón no puedan acceder tampoco, lo que ha provocado la paralización de algunas obras, según Abril.
“Urge solucionarlo”, ha dicho el regidor, que además ha manifestado que los autobuses tampoco pueden acceder al municipio desde este punto, motivo por el que se ha habilitado un microbús que recoge a los vecinos junto a la autovía para transportarlos hasta el interior del pueblo.
El Ayuntamiento de Deifontes aspira a que la próxima semana se pueda determinar con exactitud los daños que puede tener el puente, que en un extremo está “tocado”, para repararlo o construir uno nuevo paralelo al actual.
El consistorio mantiene abierta una oficina de atención a los vecinos, quienes esta semana han acudido de forma “masiva” para justificar los daños que se han producido en sus viviendas con las riadas.
Actualmente la localidad está “volcada” en tratar de recuperar la normalidad cuanto antes, ha dicho su alcalde, que además se ha mostrado confiado en que las administraciones públicas cumplan con todo lo que se han comprometido y que “no abandonen” al municipio en estos momentos.