El extremo francés del Granada, Michael Pereira, ha calificado hoy al Real Betis, al que los rojiblancos visitarán el domingo, como un rival que “siempre manda cuando juega en su casa”, por lo que ha abogado por que su equipo “afine muchas cosas que no se hicieron bien” en el último partido con el Espanyol.
Pereira ha explicado a los periodistas que el Benito Villamarín es “un campo difícil” y el Betis, “un equipo que tiene una plantilla muy profunda, que está jugando en Europa y que siempre compite”.
“El Betis siempre manda cuando juega en su casa. Son muy rápidos a la contra y arriba, y tienen jugadores de banda peligrosos”, ha recalcado el jugador galo, quien tiene claro que el objetivo del Granada será “puntuar” en el estadio verdiblanco.
Ha considerado que “para sacar algo positivo” del Villamarín deben “hacerlo bien y afinar muchas cosas que no se hicieron bien en el anterior partido” que perdieron en casa contra el Espanyol, además de “tener más acierto en los pases sencillos y estar acertados a balón parado y en la estrategia”.
Después de llevar tres semanas en el Granada, el extremo francés se siente “uno más de la plantilla”, al haberse adaptado “muy bien”, y ha reconocido que le hacía falta jugar un partido completo, como hizo ante el Espanyol, para “coger ritmo”.
La plantilla rojiblanca ha completado hoy en la Ciudad Deportiva de Armilla el penúltimo entrenamiento previo a la visita al Real Betis con la única ausencia del atacante Francisco Medina ‘Piti’, que sigue lesionado y es baja para ese choque junto al delantero nigeriano Odion Ighalo, que está sancionado.
Por distintos problemas físicos, se han entrenado al margen del grupo el central Diego Mainz, el centrocampista argelino Yacine Brahimi y el propio Ighalo.