La Asociación de Examinadores de Tráfico (Asextra) ha denunciado el “intento de estrangulamiento” sufrido por un examinador en Granada durante una prueba práctica por parte de un profesor de autoescuela, quien niega esta agresión y que a su vez acusa al funcionario de haber insultado a uno de sus alumnos.
El colectivo profesional ha informado de que los hechos tuvieron lugar el pasado martes después de que el funcionario solicitara que se conectara un testigo acústico y luminoso que alerta del uso del doble mando por parte del profesor.
Según Asextra, lejos de hacerlo según establece el reglamento, el profesor le contestó “de muy malos modos” que se le había despegado ese testigo, que lo tenía en la guantera y que, si no quería examinar a los alumnos, no lo hiciera.
El examinador manifestó entonces su intención de dar parte de su actitud a la Jefatura de Tráfico y, acto seguido, el profesor empezó supuestamente a insultarle gravemente e incluso lo amenazó de muerte.
El funcionario intentó salir del coche, algo que impidió el profesor, que cogió fuertemente al examinador del cuello, como recoge en el atestado y el parte de lesiones, denuncia la asociación en su página web.
Asextra explica además que la rápida intervención de uno de los alumnos, que sujetó al supuesto agresor, posibilitó que el examinador pudiera separarse del profesor, aunque éste último logró zafarse y comenzó a perseguir al funcionario mientras lo amenazaba de muerte.
Según la versión de Asextra, otro profesor que estaba en las inmediaciones del incidente y el propio alumno volvieron finalmente a sujetar al profesor, que estaba completamente fuera de sí y no paraba de insultar y amenazar al examinador.
La asociación, que ha condenado el que considera un “grave” suceso y que ha puesto a trabajar a su gabinete jurídico para que la supuesta agresión no quede impune, ha señalado que el examinador tuvo que ser trasladado de urgencia a un centro hospitalario, donde tras ser explorado y administrarle calmantes y relajantes, se le diagnosticó un “intento de estrangulamiento.
Por su parte, el profesor de autoescuela, de unos 60 años, ha negado que agrediera al examinador y ha manifestado a Efe que fue el funcionario el que, antes de iniciar la prueba práctica, insultó a uno de sus alumnos.
“El chivato (testigo acústico y luminoso) se había descolgado pero funcionaba y el examinador empezó a darle voces al alumno”, ha declarado el supuesto agresor, quien cree que el funcionario quería “buscarle las cosquillas y problemas”.
“Si dice que lo agredí tendrá que demostrarlo”, ha añadido el profesor, que ha dicho que tiene un negocio y que no sería capaz de hacer algo así porque no tiene intención de “complicarse la vida”.
Por su parte, la coordinadora nacional de CSIF ha mostrado su repulsa por este hecho y ha demandado de nuevo a la DGT más seguridad en el desarrollo de los exámenes.
El CSIF, que entiende en cualquier caso que es “imprevisible” que un profesor de autoescuela llegue a intentar estrangular a un funcionario, ha considerado “puntual y extraordinario” colaboración en el desarrollo de exámenes, y ha criticado la “falta de respeto y responsabilidad del jefe provincial de Granada, que obligó a un compañero del agredido a examinarse con el agresor.