El sindicato UGT ha informado este lunes de que el 61 por ciento de la plantilla afectada por el plan de ajuste de BMN-CajaGranada corresponde a mujeres, al tiempo que ha asegurado que las medidas negociadas para paliar el efecto de los despidos estipulados van a tener “un coste brutal en el empleo femenino de la entidad”.
La responsable de la sección sindical de UGT en BMN-CajaGranada, Ana María Fernández, ha señalado en un comunicado que, desde la apertura del periodo de consultas del procedimiento de despido colectivo, la empresa “ha olvidado por completo” las medidas de igualdad que tiene “obligación de cumplir en base al Plan de Igualdad existente en CajaGranada, empezando por la falta de cobertura de las bajas de maternidad”. “Siendo esta entidad pionera en la aplicación de políticas de igualdad”, la representante de UGT considera que su sucesora, BMN, “está incumpliendo por completo su responsabilidad en esta materia”.
A su juicio, “el giro retrógrado y discriminatorio que ha dado la empresa ignorando las políticas de igualdad y no discriminación terminará afectando incluso a los puestos de responsabilidad, en los que la presencia de la mujer era escasa pero se empezaba a apreciar un moderado incremento”.
“Con este plan de ajuste y con la aplicación que se ha hecho de la reforma laboral, las trabajadoras de BMN-CajaGranada han visto multiplicadas sus posibilidades de despido, reducción de jornada o suspensión temporal por encima de las de sus compañeros”, señala Fernández, quien afirma que no existe “ninguna razón objetiva” para este hecho “aparte de la discriminación por género”.
Así, la representante de UGT mantiene que las medidas a las que la empresa se comprometió en el plan de igualdad en vigor no se están aplicando”, pues “no se sustituye ninguna baja maternal” y las personas se sienten “presionadas para renunciar a los permisos legales para el cuidado de hijos, incluso invitadas a permutarlos por medidas paliativas como la reducción de jornada horaria”.
Fernández acusa por ello a la empresa de estar “forzando a las trabajadoras a renunciar a sus derechos legales, puesto que el mensaje que reciben es que tiene que temer un 22 por ciento más por el empleo que los hombres”.
Todo ello, según ha dicho, con los datos provisionales, por lo que ha augurado que cuando estén aplicadas al 100 por cien las aplicaciones forzosas del despido colectivo “se empeorarán significativamente estas cifras”.
Escucha a una de las representantes de UGT, Pilar Ramos