El poeta mexicano Eduardo Lizalde ha sido galardonado con el Premio Internacional de Poesía Federico García Lorca en su décima edición, según el fallo del jurado dado hoy a conocer.
El jurado, presidido por el alcalde de Granada, José Torres Hurtado, ha resaltado “la personal y original” voz de este poeta de la Generación del 45.
El premio, al que han concurrido este año 44 autores de 16 nacionalidades propuestos por 72 instituciones, nació siendo el de mayor cuantía económica en su género, al estar dotado en sus inicios con 50.000 euros, aunque el año pasado vio reducida su dotación a los 30.000 euros actuales.
Excéntrico por no haber seguido una pauta establecida, Lizalde (Ciudad de México, 1929) perteneció en su primera época a una corriente épica con acentos muy similares, por su tono “valiente y verbal”, al del poeta colombiano recientemente fallecido Álvaro Mutis, perteneciente a la misma generación y con el que el mexicano tuvo contacto, ha resaltado en conferencia de prensa Julia Escobar, representante de la Casa de América y miembro del jurado.
De la poesía épica, cuya obra más significativa es “La mala hora” (1956), varió a una más simbolista que plasmó especialmente en “El tigre en la casa”, una figura muy recurrente en su obra, ha recordado Escobar.
Poeta de muchos registros, Lizalde comenzó a publicar pequeños poemas a los 18 años en el periódico “El Universal”, aunque el primer libro (La mala hora), lo publicó a los 27 años.
Contrario a su éxito como escritor, tuvo incursiones breves en la política y fue cofundador del movimiento “Poeticismo”, una fallida corriente literaria que quedó en una anécdota y que el propio Lizalde criticó en su libro “Autobiografía de un fracaso”.
Emprendió después una carrera en solitario en la que dio a conocer su personal voz poética, caracterizada por una desbordada ironía y por el uso de los recursos coloquiales del lenguaje.
Así se acercó a coetáneos como Gerardo Deniz o Gabriel Zaid, pero del contenido de su obra destaca especialmente la profusión de anécdotas que recogía de su experiencia vital, la mayoría de peripecias amorosas.
Lizalde ingresó en la Academia Mexicana de la Lengua el 24 de mayo de 2007, tomando posesión de la silla que perteneció a Elsa Cecilia Frost.
Ha recibido, entre otros, el Premio Xavier Villaurrutia en 1970; el Nacional de Poesía Aguascalientes (1974); el Premio Nacional de Lingüística y Literatura (1988), el Iberoamericano Ramón López Velarde (2002) y el Internacional Alfonso Reyes (2011).
Su elección ha sido posible tras una primera votación en la que se redujeron de 44 a tres los candidatos y una posterior en la que ganó Lizalde, a quien le ha sido comunicado el galardón por correo electrónico dada la diferencia horaria con México, donde reside.
Su candidatura fue propuesta por la Casa de América, que ha formado parte del jurado junto a la Academia de Buenas Letras de Granada, el Patronato de la Huerta de San Vicente, la Universidad de Granada, la Fundación Federico García Lorca, la Residencia de Estudiantes y el Centro Generación del 27.
En ediciones anteriores, el galardón ha recaído en Pablo García Baena (2012); Fina García Marruz (2011); María Victoria Atencia (2010); José Manuel Caballero Bonald (2009); Tomás Segovia (2008); Francisco Brines (2007); Blanca Varela (2006); José Emilio Pacheco (2005) y Ángel González (2004).
Lee una entrevista al autor mejicano en el portal LETRAS LIBRES, de donde hemos tomado la foto
El jurado se ha reunido en el Aljibe del Rey, sede de la Fundación AguaGranada, en el Albaicín.