El superbólido del espacio que iluminó Sierra Nevada

roca madridLa Universidad de Huelva ha liderado un estudio que ha permitido conocer que una roca de casi dos toneladas de masa fue la que en la madrugada del 13 de julio de 2012 originó, al chocar contra la atmósfera, la bola de fuego más brillante registrada hasta ahora en España.

El impacto se produjo sobre la vertical de la Comunidad de Madrid a las 02.05 horas, informa la Universidad en un comunicado, y numerosas personas fueron testigos de la desintegración, pues el impacto generó una enorme bola de fuego que pudo ser vista en muchos puntos de la Península.

Se produjo lo que se conoce como un superbólido, con un brillo tan intenso que en la zona centro del país la noche se convirtió en día durante una fracción de segundo, llegando a iluminarse en Granada las montañas de Sierra Nevada, situadas a casi 350 kilómetros del epicentro del evento.

La colisión fue registrada por buena parte de los detectores de la Red Española de Investigación sobre Bólidos y Meteoritos, así como por una cámara situada en el Observatorio Astronómico de Calar Alto en Almería.

Según se desprende de la investigación liderada por el profesor José María Madiedo, de la Universidad de Huelva, la roca chocó contra la Tierra a una velocidad enorme, a más de ochenta mil kilómetros por hora.

“Afortunadamente la atmósfera actúa como un escudo que nos protege de la mayoría de estas colisiones y el brusco choque con el aire elevó la temperatura de la roca hasta unos 5.000 grados centígrados, haciendo que finalmente estallase a 35 kilómetros de altura sobre la Comunidad de Madrid”, asegura el investigador.

Si justo después del impacto se determinó que el objeto seguía una órbita cometaria, análisis posteriores indicaron que compartía también características típicas de asteroides, pues era mucho más resistente que los fragmentos de hielo y roca cometarios.

Aunque al principio se pensó que el fenómeno se debió a un fragmento desprendido de un cometa, los resultados han confirmado que la roca procedía de un tipo muy extraño de objeto denominado damocloide, explica Madiedo.

De hecho, hasta la fecha sólo se han identificado 88 damocloides en el Sistema Solar, frente al más de medio millón de asteroides que han sido observados y catalogados.

Quizá te interese...

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *