La Guardia Civil de La Zubia ha puesto a disposición judicial en calidad de imputada no detenida a una mujer de 41 años como presunta autora de un delito de hurto de joyas valoradas en 1.500 euros y dinero en una vivienda de Cájar en la que trabajaba como empleada de hogar.
Los agentes han descubierto que la imputada vendió las joyas sustraídas en un establecimiento de compra venta de oro del área metropolitana de Granada, de donde se han podido recuperar, informa el Instituto Armado en una nota.
El supuesto hurto fue denunciado por la propia mujer imputada, que llamó a sus jefes y a la Guardia Civil sobre las 8,30 horas de la mañana del pasado día 11 de octubre para alertar de que autores desconocidos habían entrado en la casa en un descuido, habían revuelto tres habitaciones y habían sustraído joyas y dinero; y que se había dado cuenta del hurto cuando subió a la planta superior de la vivienda a hacer su trabajo.
En la inspección ocular, la Guardia Civil observó que en las habitaciones supuestamente visitadas por los cacos, los cajones estaban abiertos pero no había nada revuelto. Y como tampoco había ninguna puerta o ventana forzada, se sospechó desde un principio de la limpiadora como presunta autora.
La sospecha se confirmó cuando la Guardia Civil localizó en un establecimiento de compra venta de oro del área metropolitana granadina las joyas sustraídas, y comprobó que la persona que las había vendido era una hija de la empleada de hogar.