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Condenados a 4 años de cárcel por comprar y no pagar productos de 28 empresas
La Audiencia de Granada ha condenado a cuatro años de cárcel a dos hombres acusados de un delito continuado de estafa que constituyeron una empresa falsa para adquirir productos de alimentación valorados en 140.000 euros a 28 empresas a las que no pagaron.
La sentencia condena a José Antonio C.A. y José Antonio C.G. a la pena de cuatro años de cárcel a cada uno de ellos, multa de 900 euros y a indemnizar a las empresas perjudicadas con más de 72.000 euros por una estafa continuada a través de una empresa de alimentación.
Según el fallo, al que ha tenido acceso Efe, el condenado José Antonio C.G. fue nombrado administrador único de una empresa dedicada a la compra de productos de alimentación que se constituyó en octubre de 2007 con un presupuesto inicial de 3.000 euros.
Sin embargo, José Antonio C.G. no tenía ninguna experiencia en el sector empresarial y sí una adicción a diferentes sustancias estupefacientes por la que accedió a representar formalmente a la empresa a cambio de dinero para droga, según detalló durante el juicio oral.
El también acusado José Antonio C.A. alquiló una nave en Cijuela (Granada) y unas oficinas con las que “fingiendo una solvencia de la que carecía” la empresa, adquirieron productos a 28 empresas de alimentación valorados en 140.000 euros.
La compra de productos se mantuvo utilizando un pago a plazos con los proveedores hasta el mes de mayo de 2008, momento en el que desaparecieron de las instalaciones tanto los responsables de la empresa como los productos adquiridos fraudulentamente.
La Fiscalía y la defensa de los condenados solicitaron durante el juicio la libre absolución al considerar que los hechos no representaban ningún delito, mientras la acusación particular que representaba a una empresa aseguradora solicitó cuatro años de cárcel para los dos condenados y otros dos acusados, Miguel Ángel G.G. y Antonio F.C.
La Audiencia de Granada ha condenado tanto al administrador de la empresa como al responsable de alquilar la nave al considerar probado que cometieron un delito continuado de estafa agravado por la cantidad obtenida de manera ilícita.
La sentencia absuelve a los otros dos acusados al considerar que no ha quedada probada su participación en los hechos.
Antonio F.C. fue acusado como el responsable de pagar al condenado José Antonio C.G. para que firmara la constitución de la empresa, aunque en el juicio no fue identificado, mientras Miguel Ángel G.G. defendió durante el juicio que solo trabajaba en la nave sin conocer la estafa.
